Por genética, algunas mujeres queman la grasa más rápido que otras. Pero hay factores (edad, peso, dieta y ejercicio) que desempeñan un papel importante. No obstante siempre puedes hacer algo para controlar el metabolismo. A continuación te ofrecemos 14 consejos que pondrán a buen ritmo tu máquina quema calorías.
1) TIENES QUE COMER. Matarte de hambre y consumir pocas calorías no es la manera más recomendable para perder peso. Tu cuerpo está programado para conservar tu peso y si de repente comes menos, tu metabolismo trabajará más lento y no bajarás ni un gramo. Haz una dieta balanceada y mantente activa.
2) DESAYUNA SIEMPRE: Aunque no lo creas, el desayuno es la comida más importante del día para tu metabolismo. Mientras duermes, éste es más lento y no se acelera hasta que vuelves a comer. Si no desayunas, tu cuerpo quemará menos calorías que si lo haces.
3) COME MÁS PROTEÍNAS: Si consumes suficientes proteínas durante el día, tu metabolismo se acelerará tanto que quemarás de 150 a 200 calorías extra. Se recomienda que del 10 al 35 por ciento del total que ingieres procedan de las proteínas. Por ejemplo: si comes 1,800 calorías diarias, asegúrate que de 360 a 630 provengan de las proteínas.
4) COMER MÁS DE TRES VECES AL DÍA. Es contradictorio, pero mientras más veces comas al día, más bajarás. Se aconseja que hagas seis comidas ligeras al día en lugar de tres fuertes. Esto es para que mantengas el metabolismo en actividad constante, lo que hará que quemes más calorías y no pases hambre.
5) NO ELIMINES LOS CARBOHIDRATOS. Es recomendable que comas carbohidratos en fibra, como son los granos enteros, las frutas y las verduras. Evita el pan blanco y las papas. Este tipo de carbohidratos eleva el nivel de insulina, lo que ocasiona que tu metabolismo se vuelva más lento y en vez de quemar lo que ingeriste lo guardes como grasa en tu organismo.
6) EVITA EL ALCOHOL: Si te gusta tomarte una copita antes de comer ¡piénsalo dos veces! Eso puede ocasionar que ingieras 200 calorías más de lo normal. Tu cuerpo quema primero las calorías que provienen del alcohol y guarda las que proceden de la comida como grasa en tu cuerpo. Si vas a beber algo, toma una copa de vino tinto, el cual solo contiene 80 calorías por copa.
7) TOMA LECHE. Es conveniente consumir productos lácteos bajos en grasa. Las mujeres que consumen leche, yogur y queso entre 3 y 4 veces al día queman un 70 por ciento más de grasa que aquellas que no lo consumen. La razón: el calcio y otras sustancias que se encuentran en los productos lácteos aceleran tu metabolismo, por lo que quemas el exceso de grasa mucho más rápido.
8) NO LE TEMAS AL PICANTE. Incluye en tus recetas un poco de picante (chile). Los chiles jalapeños y la pimienta de Cayena contienen un compuesto llamado capsacina que estimula tu cuerpo, haciéndolo secretar más hormonas del estrés (cortisol); esto provoca un aceleramiento de tu metabolismo y la quema de más calorías. Está comprobado que la gente que come picante tiende a tener menos apetito. Esto se debe a que el picante en los alimentos hace que la persona se sienta llena.
9) AUMENTA LA DIFICULTAD EN TU RUTINA DE EJERCICIOS. Los estudios muestran que una rutina de ejercicios más intensa hará que tu cuerpo trabaje más, por lo que quemarás muchas más calorías.
10) DIVIDE TU RUTINA. Cuando te sea posible, en vez de hacer tu sesión ejercicios por la mañana o por la noche, divídela en dos partes. Haz la mitad de la sesión de la mañana y la otra mitad en la noche. Por ejemplo: en la mañana, podrías hacer pesas durante 15 minutos y, en la tarde, correr durante 30 minutos. Así quemarás de 100 a 200 calorías extras ese día.
11) HAZ PESAS. Una de las mejores formas de poner en marcha el metabolismo es haciendo pesas. Conforme creces, tu metabolismo tiende a ser más lento. Si entrenas con pesas, lo puedes llegar a acelerar de un 6.8 a un 7.8 por ciento. Eso quiere decir que si pesas 55 kilos (120 libras) podrías quemar alrededor de 100 calorías más por día. ¿No tienes tiempo? Dos sesiones de 15 minutos cada semana lograrán el objetivo.
12) SUDA EL SÍNDROME PREMENSTRUAL. Es tentador no hacer nada durante las dos semanas que preceden al ciclo menstrual, pues en esos momentos nos sentimos hinchadas, cansadas y con un humor terrible. Esto nos impide pararnos del sofá; solo queremos estar solas y sin hacer nada. Pero es importante que sepas que si en esas dos semanas antes de tu período menstrual practicas un deporte o haces ejercicios, quemarás un 30 por ciento más de grasa. Un estudio muestra que si realizas ejercicios durante las dos semanas después de ovular y hasta dos días antes de menstruar, quemarás mucho más grasa que lo que acostumbras. ¿La razón? Tus hormonas reproductivas, llamadas estrógenos y progesteronas, se encuentran en su momento óptimo, por lo que te permiten que tu cuerpo utilice la grasa como energía y así quemas más.
13) DUERME. Dejar de dormir puede alterar tu metabolismo. Los estudios muestran que si duermes menos de cuatro horas por noche tardarás más tiempo en digerir la comida. Si no duermes lo suficiente, tu cuerpo estará agotado, por lo que no trabajará al ciento por ciento y quemará menos calorías durante el día.
14) APRENDE A RELAJARTE. El estar estresada engorda. Cuando estamos tensas, nuestro cuerpo está lleno de hormonas del estrés, las cuales estimulan a que las células de la grasa vayan directo a tu abdomen y éste crezca. Procurar hacer actividades que te relajen