CAMPO AÑIL, Jarabacoa. La poesía es un arma fundamental para combatir la injusticia social, porque dota de sensibilidad a quienes tienen el potencial para lograr un mundo mejor.
La afirmación la hace la poeta Ángela Hernández, Premio Nacional de Poesía 2016, ante la pregunta de un asistente a la apertura del XIV Festival de Poesía de Montaña, que inquirió en el ceremonial ¿Para qué sirve la poesía en una sociedad tan injusta como la nuestra?
Durante el ceremonial de inauguración del Festival de Poesía de Montaña, celebrado en el Centro Nocturno Punto de Café, la escritora, respondió que quienes están llamados a transformar la sociedad deben tener la sensibilidad que hace falta para tener la fuerza de transformación social.
El Festival de Poesía de Montaña, en su décima cuarta edición, también rinde homenaje, además del reconocimiento a la Hernández, es en reconocimiento de la obra pictórica del maestro jaracaboense Roberto Flores, uno de cuyos murales al fresco fue destruido por órdenes del entonces párroco de esta comunidad.
Lecturas
Los poetas invitados al evento, ubicados en proyecto ecoturístico familiar Los Bohíos Campo Añil, ubicado a diez kilómetros al sur oeste de Jarabacoa, un espacio premiado por un paisaje natural extraordinario, con casitas de estilo arquitectónico popular, iniciaron este sábado 4, un programa de lecturas con los poetas Leibi NG, Nan Chevalier y Federico Jóvine Bermúdez, y los jóvenes del Centro Cultural Perelló.
La NG, concebida normalmente como gestora literaria, mostró un talento especial para la poesía: Nan Chevalier¿, uno de los poetas nacionales de más elevada textualidad y Jóvine ofreció una muestra de lo que es capaz el danzar de años con la poesía con la cual se burla con gracia hasta de su propia impotencia sexual.
Posteriormente leyeron y los poetas de Jarabacoa (Dionisio Hernández, Daniel Ortiz, Luz María Abreu, Rosa María Rodríguez, Tomás Abreu, a quienes se agregó el rapero de letras con valores Yongelis Ramírez, con una formación poética producto del mismo festival de la montaña por lo que sus letras llaman a la solidaridad, al trabajo
También leyeron el Círculo de Escritores Veganos, los jóvenes del taller Mariano Lebrón Saviñón, (fundado por Nan Chevalier), con un grupo de voces mayoritariamente femeninas, dotadas de una perspectiva contestataria ante las embestidas tradicionales del comportamiento afectivo masculino, marcado por despedidas y agresiones del más variado tipo.
La poesía ecológica y escrita para niños, tuvo su paréntesis con los versos de Rosa Francia Esquea, Luis Carvajal y Farah Hallal, quienes leyeron sus creaciones al ambiente y al universo infantil.
El viernes
El día viernes 4 se iniciaron las actividades del Festival con seis talleres y a maestros y maestras por parte de animadores y poetas que acuden a esta cita, en los cuales se enseñó literatura dominicana, con énfasis en los poetas y los movimientos literarios.