Habitualmente los países desarrollados firman convenios para ayudar a los más pobres en regiones en vías de desarrollo, pero a veces pasa lo contrario. Venezuela suministrará combustible a bajo costo para miles de familias pobres en el estado de Massachusetts en Estados Unidos, tras la firma de un acuerdo entre funcionarios estatales y el gobierno de Hugo Chávez. El parlamentario estadounidense, William Delahunt, describió el convenio como "una de las mejores expresiones humanitarias", durante la ceremonia en la que se firmó el pacto en la ciudad de Quincy, en las afueras de Boston. La idea ya había sido anunciada por el presidente venezolano durante su visita a Cuba en agosto de este año. ¿Amigos o enemigos? El acuerdo incluye el transporte marítimo desde Venezuela a Massachusetts de 45 millones de litros de combustible para calefaccionar los hogares a un precio menor que el de mercado. Según la embajada venezolana en Washington, el beneficio se extenderá en el futuro a otras ciudades estadounidenses. El programa de cooperación beneficiará a cerca de 40.000 hogares y cientos de escuelas, guarderías y hospitales de Boston y el barrio de Bronx, en Nueva York. La iniciativa intenta palear los efectos del alza de precios y la escasez de combustible que se registró en Estados Unidos después del paso de los huracanes Katrina y Rita por el sur del país, señaló la embajada. Chávez es considerado como uno de los mayores detractores del gobierno de Bush en América Latina. Por eso, algunos analistas especulan que el convenio podría ser un intento del mandatario venezolano por ofrecer una alternativa a lo que él califica como "el imperialismo estadounidense". En total, las familias beneficiadas ahorrarán entre US$10 y US$14 millones durante el invierno. Venezuela provee casi la totalidad del combustible de calefacción consumido en Estados Unidos.