Los vecinos de Ciudad Nueva están, en estos días, en pie de lucha. Resulta que al Hotel Napolitano se le ha ocurrido demoler un edificio próximo a su instalación, lo que ha conllevado dificultades a los vecinos de las calles Cambronal y El Número que van desde enfermedades, agrietamiento de propiedades, ruidos a todas horas y ocupación de áreas privadas ilegalmente. La demolición se lleva a cabo sin las normas de seguridad exigidas por la Ley: sin vaya de concreto circundante y sin advertencia a los vecinos.
Por lo bajo se dice que el Grupo Santamaría, propietario del hotel, quiere comprar los edificios vecinos a precio de vaca muerte, por lo que procuran ocasionar muchas dificultades a los vecinos para que terminen rendidos a sus propósitos.
Otro problema de Ciudad Nueva está en la calle Padre Billini, entre la Palco Hincado y la Espaillat. Allí se construye el Condominio Jesús Aníbal, adquirido por unos extranjeros. El contratista de la obra ha decidido colocar un palo de luz y un transformador frente a la vivienda de varios vecinos, no frente a su Condominio, violando las reglamentaciones de Patrimonio Cultural, el Ayuntamiento y Obras Públicas.
En ambos casos, la Junta de Vecinos ha organizado a los residentes y ha dado los pasos correspondientes en las instituciones debidas, pero no hay forma de que los violadores de la ley cedan.
Hoy a las 5:00 de la tarde las amas de casa protestarán en la Padre Billini y a las 6:00 de a tarde se reunirán los vecinos de El Napolitano para programar su plan de lucha.