SANTO DOMINGO.-Al menos la promulgación de la papa caliente que entra en vigencia en enero le correspondió al vicepresidente Rafael Alburquerque, y no al presidente Leonel Fernández, quien luego de un susto en Haití ya estaba en México. La Ley de Reforma Fiscal registrada con el número 557-05, es como el cañonazo adelantado del Año Nuevo. En medio de la resaca, pocos se darán cuenta que de sus bolsillos el Estado comenzará a extraerle más dinero, con el argumento de compensar los ingresos dejados de percibir por el desmonte arancelario.
Con la promulgación de esta ley también se modifican las leyes 11-92 del Código Tributario, 18-88 que tiene que ver con el Impuesto sobre las Viviendas Suntuarias y los solares Urbanos no Edificados, así como la 112-00 que establece un impuesto al consumo de combustibles fósilles y derivados del petróleo.Además, las leyes y 146-00 sobre Reforma Arancelaria y Reforma Tributaria, la 40-27 y otras disposiciones con miras a la entrada en vigencia del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Centroamérica (RD-Cafta), que inicia el primero de enero del año entrante.El artículo uno explica que se modifica el numeral 2.1 del inciso VIII de los literales e y k del artículo 287 del Código Tributario, modificado por la ley número 288-04 que en lo adelante dirá "artículo 287, inciso VIII. Cuentas conjuntas de Activos".En uno de sus considerandos, establece que como consecuencia de la implementación del RD-Cafta se hace necesaria la compensación de las pérdidas de ingresos asociadas a este tratado, como la eliminación de la comisión cambiaria y de otros ingresos que desaparecen a causa de ese proceso."En virtud del Acuerdo Stand -By suscrito entre el Gobierno dominicano y el Fondo Monetario Internacional, uno de los compromisos asumidos implica la realización de varias reformas estructurales, dentro de las cuales ocupa un lugar preponderante la reforma fiscal", destaca una de las consideraciones de la pieza.La ley de Reforma Fiscal, fue aprobada de urgencia en dos lecturas consecutivas por el Senado y la Cámara de Diputados por un monto de más de 24 mil millones 359 mil pesos, con una disminución de 6 mil 500 millones de pesos de los 31 mil millones de pesos, cantidad original sometida por el Gobierno.En esta ley se eleva la base de exención del salario mínimo para el cobro del Impuesto Sobre la Renta a 23 mil 500 pesos mensuales, a partir del primero de enero del año que viene, constituyendo ésta un logro para las personas de más bajos ingresos del país.Se recuerda que el Presidente Fernández dijo que pese a estar en desacuerdo con la reducción realizada por el Congreso a su propuesta, promulgaría la referida ley.En ese entonces, destacó que los requerimientos del Gobierno suman los 31 mil millones de pesos, por lo que es imprescindible que de algún lado se obtengan los otros seis mil 500 reducidos por los legisladores en la propuesta fiscal sometida por el Poder Ejecutivo.