LA PAZ.- Los bolivianos afrontan unos comicios presidenciales rodeados de una atención internacional inédita por la compleja coyuntura social y política que atraviesa el país. Evo Morales, favorito según las encuestas, anunció que, de ser elegido, anulará los contratos de las petroleras.
Evo Morales visita una granja horas antes de la apertura de los colegios. (Foto: AFP)Los centros de votación están abiertos desde las 8.00 hora local (13.00 hora peninsular española) y permanecerán abiertos hasta las 16.00 horas (21.00 en España). Se espera que una hora después se conozcan los primeros resultados a pie de urna. Sin embargo, los datos oficiales se irán difundiendo ha lo largo de varios días, a medida que se vaya produciendo el escrutinio.Evo Morales y Jorge Quiroga, los dos principales candidatos, se mantendrán durante la jornada tan distanciados como lo estuvieron durante toda la campaña: uno votará al borde de la selva, y el otro en una exclusiva zona residencial de la capital.El indígena Evo Morales, favorito según las encuestas, depositará su voto en una rústica escuela del pueblo de Villa 14 de Septiembre, en el corazón de la región cocalera del Chapare, a unos 600 kilómetros al este de La Paz.El ex presidente Jorge Quiroga votará en una escuela —mucho mejor equipada— del barrio de La Florida, donde viven algunas de las familias más ricas de la capital boliviana.La diferencia de escenario es una muestra de la disyuntiva electoral a la que se enfrenta la mayoría de los bolivianos, entre el líder cocalero "anti imperialista" que quiere "cambiar la historia" y el tecnócrata que pretende consolidar el modelo neoliberal.El período de 48 horas de reflexión comenzó la madrugada del jueves con el despliegue de 26.000 militares y 24.000 policías para resguardar la seguridad. Además, el código electoral impone la ley seca, la prohibición de manifestarse, de organizar huelgas y de portar armas punzantes o de fuego.Más de 3,6 millones de bolivianos están convocados a las urnas para elegir al presidente, vicepresidente, 130 diputados, 27 senadores y, por primera vez, a los nueve prefectos o gobernadores regionales.Alrededor de 200 observadores de organismos internacionales y países amigos verificarán que la labor en las 121.119 mesas electorales dispuestas para la votación sea transparente.