SAN JUAN – El Comité Interagencial de la Casa Blanca para el Asunto de Status de Puerto Rico recomendó al Congreso que legisle un plebiscito para que los puertorriqueños acudan a las urnas en el 2006 y decidan si desean cambiar sus relaciones futuras con Estados Unidos.
El documento, divulgado hoy por el comisionado residente Luis Fortuño en una conferencia de prensa desde Washington D.C., establece que el Estado Libre Asociado (ELA) es "transitorio" y que "puede ser cambiado unilateralmente por Estados Unidos". El Comité, que presidió Rubén Barrales, señaló que Puerto Rico es un territorio de Estados Unidos y que las únicas alternativas descolonizadoras son la independencia y la estadidad. Fortuño precisó que, en esa primera consulta, se les preguntaría a los puertorriqueños si quieren continuar con el ELA o si desean optar por una de las dos opciones no territoriales: estadidad o independencia. "Si optáramos por cambiar, el informe recomienda que el Congreso avale más adelante otro plebiscito en el cual podamos escoger entre las dos opciones permanentes no territoriales: estadidad e independencia", dijo Fortuño. El informe recomienda al Congreso celebrar plebiscitos periódicos si los puertorriqueños votan por permanecer con el status actual, destacó Fortuño. Respecto a la independencia, el informe precisa que los puertorriqueños podrían optar por la república asociada. No obstante, sostuvo que esa opción de status sería sin ciudadanía estadounidense. "De la independencia, el informe dice que también es lograble y que bajo la independencia puede haber una república asociada, que también sería cambiable por el Congreso, pero la ciudadanía americana se pierde", dijo Fortuño. El líder estadista reconoció, no obstante, que el informe no impone términos para que el Congreso legisle las consultas, aunque aseguró que hay un ambiente favorable para así hacerlo, ya que supuestamente más de 30 congresistas republicanos y algunos gobernadores de la misma colectividad le han solicitado al presidente estadounidense George W. Bush que atienda el centenario problema. El Comisionado Residente destacó que, bajo la fórmula de la estadidad, claramente se establece que los puertorriqueños podrían votar por el presidente de Estados Unidos y que la Isla tendría representantes en el Congreso. "No dice nada sobre el idioma, no dice nada sobre súper mayoría", puntualizó. Por su parte, el director ejecutivo de la Administración de Asuntos Federales de Puerto Rico (PRFAA), Eduardo Bhatia, calificó el informe como "decepcionante" y una repetición de las conclusiones del fallido Proyecto Young de 1998. "Creo es una decepción para Puerto Rico, no para los estadolibristas ni para un grupo en particular, es una decepción para todo el pueblo de Puerto Rico. Este informe no abona nada, no añade nada nuevo, lo que hace es reiterar las conclusiones más recalcitrantes que el Proyecto Young mencionó en su momento", expresó en una rueda de prensa desde la capital federal. "Se le hizo un favor político a algunos políticos de Puerto Rico… El asunto del status tendrá que regresar a Puerto Rico", aseveró.