Santo Domingo.Escuchando la música de este tiempo, me refiero al merengue y sus variantes, y al reggetón, me llega a la memoria Wilfrido Vargas y su obra musical.
Si se analiza ahora tranquilamente, se puede apreciar que Wilfrido se adelantó a la época. Desenterró el merengue del estilo cadencioso impuesto por Johnny Ventura y que ya comenzaba a cansar a la juventud de esa época.El Beduino fue la gran revolución de nuestra música. Trajo un estilo nuevo, le inyectó de nuevos fraseos en su interpretación y en su instrumentación.Con su modalidad de hacer merengue, mezclado con jazz, dándole una velocidad meteórica y sacándodole filo a esa voz de primaria de Vicente Pacheco, Wilfrido impuso un estilo que contagiaría a toda una generación de músicos y cantantes.Demostró que Ventura no era el final del merengue. Evidenció que había larga vida para nuestro popular ritmo.Y abrió la puerta para que Fernando Villalona, Rubby Pérez, Hedí Herrera, Bonny Cepeda y otras figuras brillaran con el merengue. Pero sobre todo, su estilo fue un conducto para que otros se deslizaran por el éxito. Es Wilfrido quien abre las puertas a la generación de merengueros de los ochentas.Tuvo el tacto que luego sería la norma de darle importancia a las fusiones de nuestro merengue con otros ritmos caribeños, como el reggae y el calipso.Tuvo el acierto de reconocer la potencialidad de nuestro ritmo en los mercados internacionales, e invirtió tiempo y recursos en ganar nuevas plazas, y en verdad que lo logró.Sin el trabajo internacional realizado por este músico, la historia de éxito del merengue no se hubiese escrito como se ha hecho a nivel internacional.Cuestiones de manejo de su imagen, y algunos tropiezos personales, han ensombrecido la figura de este genio de la música dominicana.Creo que la ignorancia de mucha gente del medio ha impedido una valoración real de quiénes han sido los pilares del merengue y sitúan a Wilfrido como una más del montón.Hay en el negocio de la música que conocen bien lo que ha representado Wilfrido en el negocio, pero por mezquindad callan y hasta transfieren a otros los meritos de este talentoso músico.En algún momento el propio Wilfrido es culpable de esa situación, porque en momento se ha querido comportar como una súper estrella y en otro como una del montón.El hecho de que en un momento quiso ser más empresarios que músico no ha ayudado a que se dimensiones su imagen de Wilfrido como lo merece.Es lo que pienso yo de este artista ¿Y [email protected]