Kingston, (PL) Este año ha sido el más brutal en la historia de Jamaica, donde los asesinatos alcanzaron hoy la cifra de mil 500, realidad que tiene consternados a todos.
Los homicidios se convirtieron en el principal problema que enfrenta la administración de este país caribeño, catalogado desde 2001 como el más violento de la sub-región.
Desafortunadamente, los estudios indican que la mayoría de los asesinos son jóvenes con edades que oscilan entre 15 y 24 años y que más de 900 homicidios fueron perpetrados por adolescentes de 16 años.
Reportes del Instituto de Planificación de Jamaica revelaron, además, que en los últimos cuatro años el número de reincidentes en felonías de ese tipo aumentó en un 14,8 por ciento.
Actualmente cumplen condenas en los centros correccionales de este país caribeño un total de dos mil 160 homicidas y de ellos, 663 fueron recluidos desde 2004.
La continua violencia que se vive en Jamaica ha derivado en otro fenómeno negativo, la superpoblación en las penitenciarías, problema pendiente de solucionar.
Para aliviar ese hacinamiento las autoridades habilitaron instalaciones especiales como correccionales de menores hasta cubrir una capacidad de dos mil 978.
Sin embargo, la agudización de la delincuencia en ese sector ha forzado al Ejecutivo a exceder la cifra planificada y actualmente cuatro mil 500 jóvenes se encuentran presos allí.
La Educación Cívica a los jamaicanos, especialmente a adolescentes, es hoy una de las prioridades del gobierno del primer ministro Percival Patterson.
No obstante, muchos opinan que la rehabilitación para los jóvenes ofensores no es la requerida y son escasas las oportunidades de reinserción en la sociedad.
Lo cierto es que desde hace un quinquenio, el Poder Ejecutivo lucha por eliminar la delincuencia, pero sin obtener los resultados esperados, pese a todas las estrategias puestas en práctica.