MIAMI. Manny Ramírez ve poco probable que sea cambiado a los Orioles de Baltimore o cualquier otro equipo, y ha comenzado a figurarse en el uniforme de los Medias Rojas de Boston por un largo tiempo. "No hay cambio. Voy a quedarme en Boston, donde conozco el sistema y tengo mis amistades, especialmente mi compañero David Ortiz", dijo Ramírez ayer a ESPNdeportes.com.
El gran bateador quisqueyano estuvo de visita en el consulado dominicano en Miami resolviendo algunos asuntos personales. Ramírez, uno de los mejores bateadores de las Grandes Ligas, retomó una vieja exigencia de querer ser canjeado e incluso amenazó con boicotear los entrenamientos primaverales si los Medias Rojas no complacían su petición.
El gran salario de Ramírez, quien aún tiene pendiente por cobrar US$57 millones por las próximas tres temporadas, y la inconsistencia sobre sus deseos, han anulado los esfuerzos de Boston para canjearlo.
En las últimas dos semanas, los Medias Rojas sostuvieron conversaciones con los Orioles de Baltimore para intercambiar a Ramírez por Miguel Tejada, quien también solicitó un cambio de escenario, pero el negocio se estancó cuando Ramírez informó que solamente aprobaría un cambio si el equipo que lo toma ejecuta dos opciones de US$20 millones que tiene en su contrato.
Los Mets de Nueva York también intentaron infructuosamente armar una transacción para conseguir a Ramírez. "Voy a tomar las cosas con calma y a enfocarme en mi carrera", dijo Ramírez.
El jugador no descartó que aún los Medias Rojas sigan intentando negociarlo, pero tomando en cuenta que tiene el derecho a vetar cualquier transacción aclaró que no quiere salir de la Liga Americana y es poco probable que juegue en otro equipo solamente por los tres anos garantizados que restan a su contrato.
