SANTIAGO.- Con la puesta en vigencia de las nuevas tarifas por concepto de servicio de electricidad, concomitantemente se han recrudecido las suspensiones del servicio energético, inclusive en los denominados “circuitos privilegiados” de esta ciudad. Desde hace alrededor de tres meses, la Empresa de Electricidad del Norte (EDENORTE) viene poniendo en ejecución el sistema de garantizar las 24 horas la energía eléctrica en aquellos sectores donde sus usuarios pagan por lo menos el 80 por ciento del servicio brindado a esa colectividad.
Son esos los denominados “circuitos privilegiados” los que, al recibir más luz eléctrica, han visto aumentar sus facturaciones de manera ostensible, pero que la pagan en el entendido de que reciben un servicio que rara vez sufría interrupciones.
Pero, no bien entraron en vigencia las nuevas tarifas, por concepto de cobro de servicio brindado, cuando los “apagones” se han recrudecido, lo que significa que ahora los usuarios de ese importante servicio tienen que pagar un ocho por ciento más en sus facturas, al tiempo que son menos las horas que reciben de energía eléctrica.
Y ni hablar de los sectores donde no están en vigencia los llamados “circuitos privilegiados”. En esos lugares el asunto se torna más dramático, pues ahora tienen que padecer apagones que, de manera conjunta, mantienen sin servicio a sus moradores por entre 15 y 17 horas al día.
A finales del pasado año, el gobierno, a través de la Superintendencia de Electricidad, decidió no sólo aumentar un ocho por ciento a las tarifas energéticas, sino que puso en vigencia la modalidad de dejar fluctuar el costo de ese servicio, como la prima del dólar.
Esta última decisión, de acuerdo a economistas entendidos y expertos en los quehaceres energéticos, tendería a mantener una tendencia alcista en las facturaciones, tal y como se vive en estos momentos.