Villa Mella, Santo Domingo.-El controversial metro que aun parece una ilusión les produce innumerables inconvenientes a los residentes en este poblado sector del norte de Santo Domingo. Muchos creen en el refrán de que quien quiere moños bonitos tienen a aguantar jalones. Por eso cada mañana al salir al trabajo muchos de ellos se mal humoran entre el ruido de máquinas retroexcavadoras, patanas, grúas, cientos de obreros y grandes taponamientos, pero confiados, dicen, que de lo mejor está por venir, menos caos en el transporte. Una gran cantidad de columnas envarilladas rodeadas de un cuadro de maderas, toneladas de lodo, montones de tierra, enormes muros, amplios huecos, fuertes luces de neón para trabajar por las noches y carriles muy estrechos en las calles, tanto para llegar como para salir de Santo Domingo Norte, es el cuadro con el que esperan la llegada del 2006 los munícipes de la zona.
De las columnas que soportarán el elevado hay unas 50 solamente envarilladas algunas con el vaciado de cemento, pero, aún faltan muchas más, en otros lugares les ha sido muy difícil la colocación de los canastos para las columnas, por dificultad en el terreno que es un lodo muy pegajoso. Mientras que en el parque Mirador Norte, se derribaron decenas de árboles de todo tipo y ahora solo se ve las palas mecánicas, los camiones y unas 15 columnas de varillas por donde pasará el elevado, ya han sido levantadas en esa parte.Totalizan unas 65 columnas desde el Parque Mirador Norte hasta la avenida Hermanas Mirabal.
Esta reportera consultó a chóferes y usuarios del transporte público, amas de casa, comerciantes y estudiantes, quienes coincidieron en decir “ que a pesar de todo este panorama de dificultades se sienten optimistas porque esperan que la construcción del Elevado y el Metro Ligero contribuirá con el desarrollo económico y mejorará el caos constante que siempre ocurre en Villa Mella con el tránsito; y, que tener esa esperanza es lo que hace que las personas soporten todas las molestias que desde hace más de un mes están viviendo”.
En tanto otros expresaron sus desacuerdos por los inconvenientes. Entienden que hubo una falta de planificación y coordinación de los trabajos, que lo primero que debieron hacer las autoridades de la oficina responsable de las construcción, la OPRET, era la ubicación de una calle para desviar el tránsito y así evitar los odiosos y largos taponamientos que les ha cambiado el humor y el estilo de vida a los residentes del lugar, porque el trayecto que se hacía en 20 o 25 minutos, ahora se toma una hora y una hora y más”.
Febrero es una fecha clave
La primera fase de construcción del elevado de Villa Mella, podría estar lista
en febrero, expresó hoy el ingeniero Freddy Medina, Supervisor General del Viaducto.
Dijo que “237 columnas lleva esta parte de las cuales 155 son centrales y 82 laterales, de las centrales se han terminado 60, faltando 95 para completar el eje principal de la parte elevada del Metro, que compone la fase primera”.
El ingeniero Medina amplió que en donde quiera que se vean tres columnas una central y dos colaterales, ahí estará una de las estaciones del Metro, serán 5 las que se construirán, la primera en el Parque Mirador Norte, la segunda en los Guaricanos, la tercera en Los Cerros, la cuarta en La Paz y la quinta en la Avenida Charles de Gaulle.
También expuso que “uno de los principales problemas que han confrontado, ha sido con el terreno en 11 puntos específicos, para apoyar la zapata de las columnas centrales, han tenido que colocar unos pilotes de hierro, ya que así lo determinaron los estudios geotérmicos, por la poca consistencia que presenta el suelo en cada uno de estos puntos”.
Otra dificultad ha sido la gran cantidad de tuberías tanto del agua potable y de las empresas telefónicas Versión y Tricom, algunas han tenido que ser reubicadas, otras desviadas, se ha cambiado registros, colocado soportes, todo esto genera problemas con el tránsito vehicular.
Finalmente el ingeniero Medina destacó que unos 10 contratistas trabajan a ritmo acelerado en la obra y cada uno tiene bajo su responsabilidad alrededor de 50 obreros que laboran con ellos de forma directa e indirecta.Le pide a los residentes de Villa Mella que tengan un poco de paciencia porque al final cosecharan los frutos en ahorro de combustibles, la reducción de los entaponamientos y un mayor desarrollo comercial.