Días aciagos le esperan a los inmigrantes todos en Estados Unidos ante la posición radical del Presidente George Bush de no conceder la Amnistía a los indocumentados.
El tema que clave en las elecciones legislativas de este año es hoy el acicate con el cual han salido al frente no solo las organizaciones de ayuda y asistencia a los inmigrantes, sino los propios gobiernos de México y Centro América, quienes de una forma u otra han depuesto sus intereses partidistas y/o gubernamentales para enfrentar la postura del Presidente Bush, todo ello a favor de sus nacionales en Estados Unidos.
Sin embargo no podemos los dominicanos tener el privilegio de que el Presidente Leonel Fernández ,salga en defensa de los quisqueyanos? Por el contrario es el propio Fernández y su política migratoria, quien imita y se doblega ante la política estadounidense sobre el tema imitando incluso los intentos de sectores recalcitrantes del organigrama político estadounidense de arrebatar la nacionalidad norteamericana a los hijos de los inmigrantes sean estos residentes legales o no. Lo propio ya lo hizo el gobierno de Fernández al aprobar en territorio dominicano la ley que arrebata la nacionalidad a los inmigrantes haitianos.
La cuestión migratoria no es precisamente el fuerte de los gobiernos de Leonel Fernández. Pero es que el tema migratorio es de por sí, engorroso, desafiante, tanto que el mismo Guillermo Linares, Comisionado de Inmigración en EEUU, y Asesor de Fernández, no ha asumido liderazgo respecto al tema.
La amnistía, las limitaciones y presión social contra los inmigrantes tampoco ha encontrado defensores en el seno de la comunidad dominicana. No se dejan sentir los voceros partidistas y/o gubernamentales representantes del gobierno de Fernández. Mucho menos aquellos enclaves que intentan conciliar la comunidad, su sendero diaspórico y transnacional con las políticas trazadas desde el gobierno dominicano.
Tal es el caso del infuncional y archinumeroso Consejo Consultivo que opera en la sede del Instituto de Estudios Dominicanos ( Dominican Studies Institute). Asi como los representantes de los partidos Revolucionario Dominicano,(PRD), de la Liberación Dominicana (PLD) y el Reformista Social Cristiano(PRSC).
El precio es alto, y el gobierno dominicano lo sabe(mientras establece vínculos) de ahi que sus representantes en Nueva York creen mecanismos cada vez mas “aparatosos”e infuncionales quienes alimentan un tipo de transnacionalidad viciosa, dependiente que la distingue de otras comunidades.
Lo que explica la ausencia de liderazgo en la comunidad dominicana que no sometió a monitoreo el llamado Plan de Inmigración propuesto por el Presidente George Bush, plan calificado por las organizaciones de defensa a los inmigrantes de otras comunidades como insuficiente, electoralista en su momento, y especialmente propenso a crear trabajadores de segunda clase.
El plan que creo controversias tanto dividiendo la opinión pública a favor como en contra, inicialmente hablaba de “legalizar” a mas de ocho millones de inmigrantes sin papeles en la nación. Sin embargo para sorpresa de todos Bush, dijo un rotundo No a la Ley de Amnistía y por el contrario su gobierno incrementa cada día mas las redadas de indocumentados en los aeropuertos.
Mientras el Consulado de México,(ver la website del Consulado Mexicano) y otros “exportadores de indocumentados” como algunos califican a República Dominicana y Centro América crea foros de discusión, ofrece servicios gratuitos a sus nacionales, la comunidad dominicana vive un gran desamparo y por el contrario se convierte en presa de muchos vivos, tributarios y simples llena papeles de inmigración del Alto Manhattan.
Las iniciativas del Consulado Dominicano respecto a la Ley de Amnistía es tímida dejando desprotegidos, a los inmigrantes dominicanos incluso frente a lo que significa la Ley Patriótica, la cual hace posible que los inmigrantes por primera vez en la historia de esta nación sean deportados por tener algún tipo de asociación con organizaciones y entidades que el Departamento de Estado considere “terroristas”, sin importar que dichos inmigrantes lo desconozcan.
Según los expertos la nueva noción legal de la “asociación delictuosa" ha sido considerada por la Suprema Corte como “ajena a las tradiciones tanto de una sociedad libre como de la Primera Enmienda”.
En cambio el Consulado Dominicano es el primer censor de la libre expresión de las ideas y de asociación. Y hablo del Consulado como entidad no hablo en este caso específico de un consul equis, pues se reproduce exactamente lo mismo en todos los gobiernos.
Solo hay que acudir a algún evento o “consulta” pública y llevarle la contraria al cónsul o a cualquiera de los funcionarios consulares. La reacción no se hace esperar e incluso aparecen argumentos enfermizos para acusar a los cuestionadores/as. Lo propio se produce también en algunas oficinas de incumbentes dominicanos, quienes activan el tema de la inmigración, la Amnistía en tiempos de elecciones para facilitar la ciudadanía en sus vecindarios o distritos a fin de contar con un voto mas.
En días pasados un medio hispano y varios medios no diarios editados por pequeños círculos de dominicanos y fanáticos del negocio de edición de medios reprodujo una foto en primera plana del ex-cónsul José Fernández, éste daba cuenta de su “maravillamiento” sobre las Cárceles de Nueva York.
El ex representante comercial del gobierno dominicano en Nueva York, considero que existía un gran orden, que todo estaba bien organizado, que los presidiarios recibían buen trato en las cárceles neuyorquinas… y así sucesivamente todo muy “naice”.
Encima de que lo dicho, y su tono no respondía a la verdadera realidad de las carceles de Nueva York, donde minorías como la dominicana no recibe el trato justo, tampoco decía una palabra de la situación de los indocumentados dominicanos presos, ni mucho menos acerca de la mujer indocumentada quien muchas veces paga la responsabilidad por los hechos “delictivos” de los varones de su familia,(esposo, hermano, o hijos). Al margen del "paseo maravilloso del ex Cónsul, qué sabemos en realidad de los dominicanos/as presos (indocumentados o no) en las cárceles de New York?.
Me atrevo a asegurar que el ex-cónsul José Fernández desconoce que en las cárceles neuyorquinas el abuso sexual contra la mujer continua dentro de las prisiones, según lo informo la propia Procuraduría en el simposio La Mujer encarcelada y la salud mental (Simposio incarcelated Woman and Mental Illnes )celebrado en el 2001, como imagino también ignora que el 80% de los jóvenes negros y latinos de la ciudad han sido arrestados y registrados al menos una vez por la policía, conforme investigación realizada por el diario New York Daily News.
De modo que no le quepa duda a nadie aun juegue un papel de vital importancia para economía de RD, a partir de las remesas, aún coloque al país por lo alto con la presencia de excelentes escritores, artistas, jueces e inigualables deportistas y profesionales en diversas áreas, la comunidad dominicana paga muy caro su transnacionalidad, su fanatismo partidista y su amor por Quisqueya la bella. Y ese precio se llama orfandad.