MANHATTAN, Nueva York.-Por fin!, se impuso el espíritu deportivo frente a lo político. El Departamento de Estado Norteamericano aprobó la participación de Cuba en el Clásico Mundial de Béisbol.
En el torneo a celebrarse el tres al 30 de marzo próximo en Estados Unidos, Japón y Puerto Rico y en el cual participarán 16 equipos, de igual número de países, integrados por las mejores estrellas en este deporte de cada país.
El anuncio lo hizo Molly Millerwise, vocera del Tesoro Norteamericano, quien dijo que el acuerdo “asegura que ningún dinero del evento llegara a manos del régimen cubano”.
Indicó que el Tesoro está sumamente complacido de poder emitir el permiso y aspira a que todos los equipos muestren su talento en el escenario internacional, para deleite de la fanaticada de ese deporte.
“Se trabajo muy de cerca con World Baseball Inc. Y el Departamento de Estado para alcanzar el acuerdo que asegura el espectro legal y el espíritu de las sanciones” norteamericanas contra el régimen de Fidel Castro, puntualizo Millerwise.
"El Presidente (George Bush) quería que esto se resolviera de forma positiva", dijo el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, en un correo electrónico enviado a la AP.
"Nuestras preocupaciones eran que no llegara dinero al régimen de (Fidel) Castro y que el Clásico Mundial de béisbol no fuera usado por el régimen para espiar. Creemos que esas preocupaciones han sido atendidas".
Los organizadores –Grandes Ligas y la asociación de peloteros profesionales– volvieron a solicitar el permiso después de que el gobierno cubano anunció que donaría a las víctimas del huracán Katrina cualquier dinero que gane en el torneo, al que fueron invitados 16 países.
"Trabajando de cerca con World Baseball Inc. y el Departamento de Estado, pudimos alcanzar un acuerdo que asegura el espectro legal y el espíritu de las sanciones" estadounidenses que pesan sobre la isla, dijo la portavoz del Tesoro, Molly Millerwise.
"Este acuerdo asegura que ningún dinero llegará a las manos del régimen de Castro. El Tesoro está complacido de poder emitir la licencia y anticipa poder ver a todos los equipos demostrando su talento en un escenario internacional", agregó.
El embargo que mantiene Estados Unidos sobre la isla comunista prohibe ciertas transacciones comerciales con Cuba.
El gobierno cubano no emitió una reacción oficial, pero la alegría por la decisión era evidente en la calle.
"¡Magnífico, tremendo!", exclamó Osvaldo Herrera mientras conversaba en una esquina sobre la serie cubana de béisbol, la gran pasión de este país.
Después del rechazo inicial, la federación internacional de béisbol amenazó con retirar su apoyo al campeonato si Cuba no participaba. Puerto Rico, sede del grupo en el que jugarán los campeones olímpicos y mundiales, también amenazó con renunciar a la sede.
"Nosotros siempre estábamos positivos en esto", dijo Antonio Muñoz, el promotor puertorriqueño que pagó millones de dólares por llevar las dos primeras rondas del torneo a la isla.
"Yo siempre dije que no había plan B. El plan era uno: que Cuba viniera y todos los esfuerzos tenían que ir hacia lograr esa aprobación", agregó.
El torneo se jugará del 3 al 20 de marzo en Japón, Puerto Rico y Estados Unidos, y será la primera vez que estrellas de las mayores podrán representar a sus países en un torneo mundial.
Los otros 15 equipos entregaron esta semana sus listas preliminares de 60 jugadores.
Cuba ganó la medalla de oro en las olimpiadas de 1992, 1996 y 2004, y Estados Unidos ganó en el 2000. El béisbol olímpico originalmente estaba circunscrito a jugadores aficionados, pero incluso después de que se permitió la participación de profesionales en el 2000, los estelares no jugaron porque Grandes Ligas no detiene su temporada por las olimpiadas.
El equipo cubano, líder indiscutido a nivel amateur, tendrá una dura prueba al enfrentar jugadores de Grandes Ligas.
Cuba ha perdido parte de su mejor talento en los últimos años por deserciones. Los lanzadores Liván Hernández, Orlando "El Duque" Hernández y José Contreras desertaron en la última década y todos juegan en las mayores.
El júbilo por la decisión entre los aficionados cubanos no ocultaba la preocupación por la diferencia en el talento de sus peloteros con los jugadores de las mayores.
"El nivel de la pelota cubana está por ver, porque se han ido muchos talentos", dijo Enrique Pérez, un fanático del equipo capitalino Industriales.
Pero Juan Contreras, quien se identificó como primero del pitcher de los Medias Blancas de Chicago José Contreras, afirmó que sí hay calidad.
"¿No lo demostraron los que están allá? ¿Tuvieron o no un buen papel en la Serie Mundial?", preguntó, refiriéndose a Contreras y Hernández, integrantes del cuerpo monticular de los campeones Medias Blancas.
Barry Bonds, Alex Rodríguez y Roger Clemenes son algunas de las estrellas en el róster estadounidense, mientras que Manny Ramírez, Miguel Tejada, Pedro Martínez y Albert Pujols son algunos nombres del imponente róster dominicano.
Venezuela es otro favorito con Miguel Cabrera, Bobby Abreu y Johan Santana, mientras que Puerto Rico luce potente con Carlos Delgado, Carlos Beltrán e Iván Rodríguez.
