BOLIVIA.-El presidente venezolano Hugo Chávez llegó a Bolivia este sábado por la noche para asistir a la investidura de Evo Morales, el nuevo mandatario indígena del país, al que calificó de "un enviado de Dios a través del pueblo".
Mientras el presidente Chávez rompía el protocolo para tomar contacto con los periodistas que lo aguardaban en el aeropuerto y fustigaba al "capitalismo" y al "imperialismo", a la misma hora Morales, quien asumirá su nuevo cargo hoy, sostenía un encuentro en su apartamento con el enviado del presidente George W. Bush, el subsecretario de Estado para asuntos latinoamericanos, Thomas Shannon.
"Después de 500 años de expiación llegó Evo Morales enviado por Dios a través del pueblo, y venimos a festejar el inicio de una nueva era", declaró Chávez tras descender de su avión bien abrigado para combatir el frío del altiplano.
En la plataforma, y tras recibir honores militares, el alcalde de La Paz Juan del Granado lo declaró huésped ilustre y le entregó las llaves de la ciudad. "Bolivia consiguió de nuevo retomar el camino de la grandeza que se había trazado el imperio socialista de los incas antes que arribarán los conquistadores", dijo Chávez, quien agregó que "el capitalismo y imperialismo son un camino al infierno".
Chávez llegó de Brasilia, donde celebró mantuvo encuentros con sus colegas Néstor Kirchner de Argentina y el brasileño Luis Ignacio 'Lula' da Silva en torno a la posibilidad de construir un gaseoducto desde Venezuela hasta Argentina, que pasaría por Brasil y Bolivia.
En el aeropuerto de El Alto dijo que "el gasoducto (al sur) ya lo hemos acordado y no podrá hacerse sin Bolivia, que tiene unas de las mayores reservas de gas del mundo". También anunció que acordó con Evo Morales la apertura de una oficina en La Paz de Petróleos de Venezuela (PDVSA).
"Ya hay un gasoducto desde Santa Cruz (Bolivia) hasta Río de Janeiro y ése se unirá con el gasoducto del sur", señaló. A las afueras del hotel donde se hospedó, en la residencial zona de la Plaza Isabel la Católica, medio centenar de personas lo aguardaban para saludarlo, con carteles y banderas de Bolivia y Venezuela. 'Latinoamerica unida es posible', decía uno de ellos.