LONDRES.-Este año, los agoreros probablemente van a volver a quedar defraudados. Pese al déficit de los EE.UU, a los precios del petróleo y al menor crecimiento, el 2006 sería un buen año.
La economía mundial sorprendió nuevamente a casi todos en el 2005 y volvió a crecer casi tanto como en el 2004 —un año que fue récord en tres décadas— pese al aumento de los precios del petróleo y al endurecimiento de la política monetaria en los EE.UU., la mayor economía mundial.
Las alarmas de comienzos de año respecto de que los enormes desequilibrios mundiales y el encarecimiento de la energía provocarían una desaceleración en la economía estadounidense, un colapso del dólar y, posiblemente, una recesión mundial, resultaron infundadas. Sin embargo, algunos de los mismos problemas e inquietudes subsistirán en el 2006; no han desaparecido.
Es probable que este año esté dominado por lo que pase con el precio del petróleo, por una mayor reactivación en países como Japón y Alemania , que hasta ahora tenían una reanimación débil, y por las subas de tasas de interés en las grandes economías, cuyos bancos centrales querrán sacar el dinero ultra ba rato que viene alimentando un boom inmobiliario mundial .
Para empezar por la economía de los EE.UU., es impresionante el modo en que capeó el año pasado las alzas del precio del petróleo y la devastación de los huracanes en el Sur, y creció.
Las últimas cifras disponibles muestran que el crecimiento alcanzó un 4,1% anualizado en el tercer trimestre del 2005, pese a una serie de aumentos en las tasas de interés dispuestos por la Reserva Federal a partir de mediados del 2004. Entre entonces y ahora, el banco central estadounidense subió 13 veces la tasa de interés de referencia para corto plazo, hoy del 4,25%.
La mayor parte de los analistas esperan dos o tres aumentos más en los próximos meses: la Fed llevaría la tasa a un nivel neutro que ya no estimule la economía.
En el año que comienza, el primer acontecimiento significativo de la economía, para los EE.UU. y para el mundo, es la partida de su cargo, a fin de mes, del veterano Presidente de la Reserva Federal, Alan Greenspan, luego de 18 años. Se irá por todo lo alto, con el crédito de haber salvado a la economía estadounidense de una recesión potencialmente enorme cuando estalló la burbuja de las puntocom en el 2000. Puede ser, también, que se esté yendo justo a tiempo, y que, si las cosas van mal este año o el que sigue, su legado no sea tan bien visto como se lo ve ahora.
Hoy los estadounidenses están muy endeudados y parados sobre viviendas cuyo valor ha subido espectacularmente. Si el mercado inmobiliario se cae, el mundo entero se enterará de ello, porque el consumidor estadounidense, que casi seguramente dejará de gastar, viene siendo un soporte clave de la economía mundial.
Buena parte del gasto de los últimos años se asentó sobre la suba del precio de las viviendas, en la medida en que los consumidores estadounidenses han estado utilizando sus casas como máquinas de obtener dinero, al rehipotecarlas para liberar valor. Eso también pasó en Gran Bretaña, aunque el proceso se ha detenido, y en otros países como España.
Ya hay señales de que el mercado inmobiliario está comenzando a desacelerarse en los EE.UU. y ese proceso continuará probablemente en el 2006. La desaceleración gradual de los precios de las viviendas en Gran Bretaña y Australia, sin embargo, alienta algunas esperanzas de que el mercado inmobiliario estadounidense se desinfle lentamente y no se caiga de golpe. Eso es lo que el sucesor de Greenspan, Ben Bernanke, debe estar esperando.
Con tasas de interés en alza y petróleo cada vez más caro, parece improbable que los EE.UU. puedan mantener el mismo ímpetu del 2005; pero sigue siendo perfectamente posible esperar para este año un crecimiento del 3% o más, que no desentonaría entre los índices más fuertes del mundo, exceptuados, claro, los de China e India.
DÓLAR MENOS FUERTE
Todo eso significa que un achicamiento del enorme déficit de cuenta corriente de los Estados Unidos, hoy superior a los 800.000 millones de dólares (o 6% de la economía) es improbable este año. La idea generalizada es que en algún momento la economía estadounidense tiene que morigerar su crecimiento, importando menos y exportando más merced a un dólar más bajo, para poder limitar un poco el déficit.
Hasta ahora, los países de Asia, en particular China, parecen felices de seguir invirtiendo sus superávits de cuenta corriente, que crecieron vendiéndoles manufacturas baratas a los estadounidenses, en los propios EE.UU. Eso hizo que el año pasado el dólar volviera a subir después de tres años.
¿Y qué hay del petróleo este año? Tras haber subido a más de 70 dólares el barril en el momento en que golpeó el huracán Katrina, se replegó a cerca de 60 dólares el barril , pero en lo que va del año ya volvió a dar sustos.
Llama la atención que la economía del mundo haya logrado tal expansión en una situación como ésta. Pero lo que disparó los precios fue el fortalecimiento de la economía mundial, que impulsó la demanda , y no una interrupción de la oferta como en las crisis petroleras de 1974 y 1979. La inflación mundial también permaneció notablemente estable.
Los expertos (ninguno de los cuales, dicho sea de paso, predijo el crecimiento de los últimos 18 meses) están pronosticando que —en la medida en que no se espera que la economía crezca mucho más ni mucho menos— la demanda de petróleo probablemente siga igual. Y, dado que todavía no habrán aflorado nuevos flujos de oferta significativos, la impresión es que los precios seguirán altos.
China seguirá siendo un gran protagonista este año. Si los enormes retoques (al alza) del tamaño de su economía que anunció en diciembre son genuinas —y hay pocas razones para no creerlo— eso significa que China es ahora la cuarta economía del mundoy que ha desplazado a Gran Bretaña al quinto lugar. Probablemente China muestre de nuevo un crecimiento muy fuerte este año luego de una expansión de cerca de 10% en el 2005. La cuestión de si y cómo Beijing dejará revaluar el yuan será una inquietud clave de los mercados monetarios a lo largo de este año.
El gigante asiático podría ser víctima de medidas proteccionistas adoptadas en algunos países ricos del mundo, en la medida en que los políticos traten de complacer a los grupos de interés domésticos e intenten bloquear las importaciones chinas (algo que iría en detrimento de los intereses de los consumidores).
JAPÓN Y ALEMANIA
Un dato positivo del año probablemente sea la recuperación, finalmente, de las economías de Japón y Alemania, la segunda y la tercera del mundo, respectivamente. Eso es realmente positivo porque los EE.UU. y China han tenido que proporcionar el principal impulso para el crecimiento mundial en los últimos años, mientas Japón y Alemania estaban estancadas.
Ambos países parecen estar andando con pie firme, si bien el Banco Central Europeo ya ha comenzado a aumentar las tasas de interés y probablemente vuelva a hacerlo este año. Esperemos que eso no impida que la fortaleza del sector exportador se derrame sobre la economía local.
El Banco Central de Japón por ahora tiene las tasas de interés en cero, pero parece menos apurado que el Banco Central Europeo para empezar a subir las tasas. La mayoría de los analistas calculan que quedarán en cero hasta el 2007.
De modo que, en conjunto, el panorama es bastante benigno, con un crecimiento que se empareja un poco más por el mundo. El riesgo de una caída del dólar o un derrumbe en la economía estadounidense se mantiene. Pero los agoreros que pronosticaron catástrofes para los tres últimos años resultaron estar equivocados las tres veces. Este año, es improbable que las cosas sean muy distintas.
TRADUCCION DE CLAUDIA GILMAN
La falta de un nuevo código laboral y ley de seguridad social profundiza las desigualdades…
El show “D’Parranda” llenó de alegría y merengue el Jaragua. Santo Domingo, República Dominicana. -…
El idioma español rompe barreras y supera expectativas globales El español, idioma de Cervantes, está…
PEDATEC somete a la justicia de 17 personas y logra cuatro condenas por delictivos contra…
investigadores habrían derriban el pilar invisible del modelo estándar cósmico Un equipo de físicos y…
El oro en depósitos minerales cercanos a volcanes finalmente encuentra respuesta. Un reciente estudio científico…