Según un reporte del Servicio Jesuista de Refugiados Migrantes, la situación en Wanament (Juana Méndez) sigue siendo tensa, porque el grupo antilavalas insiste en que se pretende imponer a René Preval como presidente de Haití y han dicho que si eso ocurre van a quemar la ciudad tronteriza con República Dominicana. Ambos bandos se reunieron con la mediación del obispo de Fort-Liberté, monseñor Chibly Langlois, quien trata de buscar un arreglo entre las partes. WANAMENT (Juana Mendez) Haiti.- El obispo de Fort-Liberté, Monseñor Chibly LANGLOIS, que estaba celebrando en Wanament (Juana Méndez) la mañana del 25 de enero una misa en memoria de los 25 haitianos asfixiados en República Dominicana, convocó a los 2 grupos armados (prolavalas y antilavalas) que seguían enfrentándose con motivo de la llegada del candidato a la presidencia René Préval, el día 24 de enero.
El grupo antilavalas se oponía a que Préval visitara la ciudad para hacer su campaña, mientras el otro grupo respondía también con violencia: tirando piedras, botellas y balas.
El obispo, al terminar pronto dicha misa hacia las 11h00 de la mañana, acompañó al párroco de Wanament (que tuvo que salir varias veces del templo y de la misa para hablar con los dos grupos en pleno enfrentamiento), padre Pierre Ernest JOSEPH, y la comisión de la sociedad civil de Wanament para dialogar con los dos grupos en su propia “base” e invitarles a una reunión urgente e inmediata en la casa parroquial.
Los dos grupos respondieron positivamente a la invitación del obispo y enseguida fueron junto con el obispo a la casa parroquial. Mucha gente quiso participar en la reunión, pero el párroco permitió que entraran sólo los representantes más influyentes (o líderes) de los dos grupos para que pudieran intercambiar sus puntos de vista mediante la mediación del obispo, el párroco y la comisión de la sociedad civil.
Fue una reunión muy tensa (durante más de tres horas), ya que partidarios armados y furiosos de ambos grupos se juntaron alrededor de la plaza central de Wanament, frente a la Casa parroquial, esperando la consigna y la decisión final de sus líderes respectivos para enfrentarse. En esta reunión, se llegó a estos acuerdos:
1) que los representantes de los dos grupos hablen con su “base” para invitarles a la calma y a poner fin a las hostilidades y los enfrentamientos;
2) que estos dos grupos que pertenecen a partidos políticos elaboren y firmen un protocolo (un tipo de acuerdo o de código de ética) respecto al proceso de las elecciones, es decir antes, durante y después de las elecciones. Este protocolo determinaría un mínimo de condiciones y de reglas que deberían respetar los partidos políticos durante el proceso de las elecciones, por ejemplo: respetar la libertad de opinión, de asociación, de la prensa; que otro candidato pueda hacer su campaña sin problemas, etc.
3) y que se invite a los demás partidos a participar en la elaboración de este protocolo, a firmarlo, y que todos lo respeten y lo observen.
La Comisión de la sociedad civil planeó hacer una reunión el día siguiente, el 26 de enero, con los demás partidos políticos para que ellos también participen en este proceso de consensuar un protocolo sobre las elecciones.
Como fruto concreto de la reunión convocada por el obispo de Fort-Liberté, los dos grupos armados se fueron a sus bases respectivas y cumplieron lo acordado, es decir, invitar a sus partidarios a parar la violencia y los enfrentamientos armados que habían iniciado desde la mañana del martes 24 de enero. Así, desde la tarde del día 25 de enero, la ciudad de Wanament volvió a la calma hasta el día de hoy, viernes 27 de enero.
Seguimiento a reunión del 26 de enero entre la Comisión de la sociedad civil y los partidos políticos
El día 26 de enero se realizó la reunión planeada por la Comisión de la sociedad civil de Wanament; a ella sólo respondieron estos 6 partidos políticos: LESPWA (de René Préval), OPL, MOKRENA, LAVALAS, PON, MPH. Se notó la ausencia del otro grupo armado (antilavalas) en esa reunión.
No se tocó el tema del protocolo tal como fue acordado, porque la mayoría de los representantes de los partidos dijeron que, para llegar a tal protocolo, primero habría que hablar y juntarse también con las instancias responsables de llevar el proceso electoral a nivel municipal (de la comuna de Wanament) y a nivel provincial (del departamento del Noreste), tales como el BEK (Biwo Electoral Kominal –Oficina Electoral Municipal-), el BED (Biwo Electoral Depatmantal –Oficina Electoral Provincial-) y la Minustah.
El argumento de estos partidos es que estas instancias deben rendir cuentas de cómo están llevando el proceso electoral en el Departamento del Noreste y en Wanament; además, ellas tienen que explicar las anomalías que están sucediendo dentro del proceso.
Por ejemplo, algunos representantes de partidos dicen que no tienen a sus representantes dentro del BED y del BEK y que sospechan que la Minustah se está preparando para hacer trampas a favor de un candidato, a saber, René Préval. Insistieron algunos que si realmente la Minustah llega a hacer eso (es decir, imponer a Préval como presidente), quemarán toda la ciudad.
En este contexto, la Comisión de la sociedad civil de Wanament está planeando reunirse para analizar y ver qué se debe hacer en esta tarea tan difícil de mediar entre grupos que no quieren escuchar, ni sentarse juntos, mucho menos consensuar. Estamos intentando impulsar el diálogo entre ellos y hacer un ejercicio democrático (buscar consensos y reglas de juego) para que abandonen la vía de la violencia y respeten los derechos, la vida y la integridad de la población civil, que generalmente suele ser la gran víctima de los enfrentamientos armados.
Ya la Comisión de la sociedad civil de Wanament ayudada por el obispo de Fort-Liberté logró por lo menos el cese de la violencia y un acuerdo mínimo con los dos grupos, pero la tensión puede resurgir en cualquier momento: Wanament se vuelve una bomba de tiempo.
Wanament, Viernes 27 de febrero
Solidarite Fwontalye/Servicio Jesuita a Refugiados y Migrantes
Edson LOUIDOR, Encargado de Comunicación e Incidencia