Leí su Editorial acerca del lenguaje soez usado por algunos lectores anónimos, y tuve la impresión de que DIARIODIGITAL.COM es un medio cibernético orientado por una persona con su cerebro bien amueblado. (Carta de Frank Peña)
Nueva York, sábado 4 de febrero del 2006.
Sr. José Tejada Gómez
Director "DIARIODIGITALRD.COM"
Estimado Director:
Por correo recibido del amigo y reportero Rodolfo de la Cruz, quien es su colaborador en Ohio EEUU, hoy entré en contacto con DIARIODIGITAL.COM, y créame al decirle que me sentí muy complacido haciendo una ligera revisión al periódico que usted dirige.
Leí su Editorial acerca del lenguaje soez usado por algunos lectores anónimos, y tuve la impresión de que DIARIODIGITAL.COM es un medio cibernético orientado por una persona con su cerebro bien amueblado.
También leí la entrevista a Gabriel García Márquez, y su contenido resultó una Escuela de Vida para quien le escribe esta carta.
Fue satisfactorio para mí percibir en su periódico un trabajo de equipo, no una página de Internet cualquiera y sin dirección postal conocida, dónde sólo un individuo, acostado en su cama y con una cerveza en la boca, decide qué material se publicará y cuáles escritores serán sacados de lista y cuáles se mantendrán en el "aire" escribiendo aunque sea basura.
Odié el Deporte durante los primeros 54 años de mi vida, y nunca abrí la sección deportiva de un diario dominicano. Mi padre solamente leía en esos mismos años las "tiras cómicas" de El Caribe o La Nación, y yo únicamente las secciones de cine y anuncios de difuntos o de muertos, como lo hacía J. Agustín Concepción el fundador de la Columna "Gazapos".
Viejo mi padre, y con dos pesos en el banco, dejó a un lado los "muñequitos" y se mudó a los Clasificados.
Y yo, para no quedarme atrás, a partir del 12 de mayo del 2002 enterré el cine y los obituarios e inicié una nueva vida en el área deportiva de los periódicos.
Tengo, pues, 4 años y 7 meses dedicados casi exclusivamente a la lectura y la investigación de la historia del béisbol.
En fin, entre mi padre y yo, y durante un tiempo que abarca 78 años, apenas leímos cinco secciones de los periódicos: Muñequitos, Clasificados, Cine, Obituarios y Deportes.
Como pareja, mi padre y yo sólo podemos opinar de esos cinco elementos, o para ser más preciso, mi progenitor apenas sabía hablar de El Gato Félix y una finca con cuatro vacas, y yo de muertos, del cine mudo o sonoro, y de Babe Ruth o de José Canseco.
Pensé 4 años atrás que el mundo deportivo era un ambiente bien distinto a la farándula, donde las personas se tratan como hermanos.
Y, estaba equivocado, pues tal vez en la crónica deportiva hay más inmundicia que en el periodismo político pagado.
Esa inmundicia deportiva se hace mayor cuando aparecen en el ambiente personas como yo, quien nunca ha jugado fufú o yoyó.
Pero, tengo que reconocer que entre los cronistas deportivos dominicanos hay un selecto grupo, un segmento de gente buena, culta y fino trato que cada día me alienta a continuar con mi hobby, afición o entretenimiento.
A ese grupo especial, que llamo grupo base o la plebe, constituido por individuos como Yaqui Núñez del Risco, Carlos Nina Gómez, Dionisio Soldevila, Américo Celado, Carlos José Lugo, Enrique Rojas, Carlos Ramia, Bienvenido Carmona, Rolando Guante, Héctor García, Leo López, Billy Berroa padre y Berroa hijo.
En los Estados Unidos también hay un grupo plebeyo, individuos buenos y eruditos que luchan para que yo no me desanime:
Diego Zorrilla de ESPN y Disney World Corp.; Beto Villa, Francisco Rivera, Burrito Terán y Félix de Jesús de la Cadena New York Yankees; L. Torres de los San Francisco Giants; Armando Talavera de ESPN Radio; Mario de Jesús de Premios Deportivos Latinos; Leonel Peña, Francisco Núñez y Bernardo Martínez de la Gran Cadena Radial en Miami; y de Nelson Encarnación, Subsecretario de Estado.
Entiendo perfectamente que los escritores deportivos de mi país República Dominicana y que pertenecen a la élite del conocimiento y a la cúspide empresarial menosprecien mi labor, y comprendo que es una burla para ellos que un "Juan de los Palotes", un ignorante y aparecido se ponga a escribir "tesis académicas".
En 13 días tengo una cita en el Sistema Universitario de la ciudad y el Estado de Nueva York, para discutir mi proyecto de investigación en dos tomos "50 Años del Béisbol Dominicano en las Grandes Ligas 1956-2006".
Espero que Dios meta sus manos en mis sueños de escribir esos dos tomos de historia, que abarcarían la llegada de Osvaldo Virgil a GL en 1956 hasta la temporada del 2006, para no tener que escribir cuartillas para comer en mi vejez.
Si no ocurre así, me resigno a las disposiciones del Creador.
Los humanos no fuimos creados para criticar y evaluar a Dios; es él quién nos juzgará al final del camino, quién dirá cuáles de nosotros se comportó de acuerdo con sus Mandamientos.
Sr. Director José Tejada Gómez, espero que su Editor Deportivo (el intelectual Renaldo Bodden) sea un miembro de la Plebe como quien firma esta correspondencia; si ese Editor forma parte del grupo élite que yo he aludido, le aseguro que mi último ensayo -que estoy enviando como colaboración- irá a parar al retrete.
Pero, una acción así no me molestaría pues en realidad esta carta tiene como agenda central presentarme ante usted, que la Dirección de su periódico sepa que me llamo Frank Peña, y que siempre estoy en disposición de ayudar al prójimo porque éso es un mandato del Señor.
Al Sr. Bodden que me excuse por haberlo puesto como ejemplo a fin de desarrollar mi pensamiento "filosófico"; que entienda que es sólo un recurso del lenguaje, y que esté seguro de que yo tengo en alta estima su escritura.
Aclaro eso último, pues en los medios dominicanos de la Isla y de EEUU hay "intelectuales brutos" quienes se alborotan, pican y se vuelven fieras si alguien les escribe con ironía.
Deseo, antes de poner punto final, que su empresa DIARIODIGITALRD.COM se convierta en una montaña de éxitos educativos, intelectuales y, ¿por qué no?, económicos.
Siempre listo para lo que usted pueda ordenar.
Lic. Frank Peña.
[email protected]