De acuerdo con un reporte periodístico fechado el lunes 14 de febrero del
pasado año 2005, más de 15 personas habían fallecido en accidentes de
tránsito provocados por la falta de señalización en la Autopista Las
Américas, en el tramo comprendido desde el peaje hasta el kilómetro 38 en
Boca Chica, -desde noviembre 14 del 2004 hasta el 14 de febrero del 2005. A esa suma de víctimas de la ineficacia, la falta de fiscalización del
Estado y el incumplimiento de contratistas privados, habría que sumarles
muchos otros que fallecieron en el tramo que se extiende desde el puente
Juan Carlos hasta la entrada del Aeropuerto Internacional Las Américas.
Es lamentable, que la principal vía de acceso al país, la principal cara que
debe mostrar el país al turista –sector del cual recibimos mas de dos mil
millones de pesos anualmente- presente un espectáculo digno para filmar una
película de misterio o como decimos los campesinos “esa carretera se parece
a la boca de un lobo de oscura”.
Repito, es lamentable, que una vía tan importante como la Autopista Las
Américas se encuentre completamente oscura y sin ningún tipo de
señalización, situación que se agrava con los trabajos de reparación y
ampliación a que está siendo sometida.
Sin embargo, esa situación no debería presentarse, puesto que el pasado
gobierno firmó un contrato a nombre del Estado Dominicano, avalado por el
Congreso Nacional, donde cede por un período de 30 años, el derecho de
administración y cobro del peaje de Las Américas, -el más importante del
país-, a la empresa de capital dominico-español Consorcio Dominicano de
Autopistas y Carreteras –CODACSA-.
De acuerdo con ese contrato, la referida empresa tiene bajo su
responsabilidad, no sólo el cobro del peaje, sino además, la ampliación,
remodelación, señalización e iluminación de la Autopista Las Américas, así
como la construcción de otros dos nuevos peajes a la salida del boulevard de
Juan Dolio y el otro a la entrada de La Romana.
El contrato con el Consorcio Dominicano de Autopistas y Carreteras
–CODACSA-, le consesiona por 30 años, el tramo que va de la Autopista Las
Ameritas hasta la rotonda de la avenida Circunvalación de San Pedro de
Macorís, para su mantenimiento, así como la construcción y mantenimiento de
esa vía desde el puente del río Higuamo hasta La Romana cuando el tráfico
vehicular en ese tramo supere los siete mil vehículos diarios.
Informes confiables, estiman en unos 20 millones de pesos, las recaudaciones
por concepto del peaje de Las Américas, sin embargo, la empresa que tiene a
su cargo la concesión de la importante vía de comunicación, no le alcanza
para señalizarla ni iluminarla.
Considero que la Secretaría de Obras Públicas, debe jugar un rol más activo
al momento de fiscalizar y supervisar obras de tanta importancia como la de
Las Américas, puesto que son miles los turistas que se mueven por allí,
además de que en la región Este se halla el principal polo turístico del
país.
Es lamentable que en nuestro país tengan que ocurrir grandes tragedias para
que se le ponga atención a determinadas situaciones.
O es que estamos esperando a que la oscuridad de la noche junto a la falta
de señalización provoquen una tragedia de grandes proporciones, con la
consiguiente pérdida de vidas.
O es que además, estamos esperando a que nuestros competidores a nivel del
turismo internacional, inicien una campaña tomando como punta de lanza esa
situación.