SANTIAGO.- Las calles de varios sectores de esta ciudad se tiñeron de sangre las noches del sábado y domingo pasados, como consecuencia de la muerte de cinco personas (incluyendo dos anoche al término del desfile del carnaval) así como las heridas de balas inflingidas por un cabo policial a un haitiano.
Las primeras víctimas fueron Ismael Ramos, de 23 años y Melvin Lugo, de 24, ambos asesinados en el sector Bella Vista. El primero fue linchado por una turba, luego de ser sorprendido robando en una casa de esa barriada, donde era considerado como un “azote” por los hurtos frecuentes que cometía, situación que había puesto en alerta a sus vecinos, hasta que el sábado lo hallaron “con las manos en la masa” y lo mataron a trompadas, palos y pedradas.
Mientras que Lugo cayó abatido a tiros, cuando alegadamente se resistió a ser detenido por una patrulla de la Policía Nacional, que lo buscaba por su presunta participación en el robo de vehículos en la ciudad, encontrándose dos automóviles sustraídos en el sitio donde fue ultimado.
La Policía lo había vinculado a la banda que opera en esta zona desde hace meses y que se dedica a robar vehículos. Newton José González, sindicado como cabecilla del grupo, murió en un alegado intercambio de disparos la semana pasada.
Entre tanto, concluida la fiesta del carnaval santiaguense en la noche del domingo y como es una costumbre, cientos de personas se quedaron en los alrededores del Monumento a los Héroes de la Restauración, tradicional lugar donde comienza el desfile carnavalesco.
Allí, dos hombres, hasta ahora desconocidos, recibieron heridas de armas blancas, a causa de las cuales uno murió instantáneamente y el otro mientras era atendido en el hospital regional universitario “José María Cabral y Báez”.
El domingo en la noche, también, un cabo de la Policía Nacional hirió de balas en ambas piernas a un haitiano, luego que el extranjero atacara a machetazos al propietario de un colmado, porque se negó a despacharle algunos productos a crédito, porque este tenía una considerable deuda en el negocio.
Al llegar el agente policial al sitio, presuntamente el haitiano le fue encima con el arma blanca, lo que habría obligado al uniformado a hacerle los disparos. Los nombres de los involucrados se desconocían hasta media mañana de hoy.