SANTIAGO.- Fue en la habitación que ocupaba en un hotel de Madrid, donde, tras pasarse casi toda la madrugada caminando por las calles de la capital española, donde Alberto Cortez compuso "Cuando un Amigo se Va" que, en principio, algunos entendían que era una canción para homosexuales.
Y lo hizo profundamente atribulado por la muerte de su padre, ocurrida en su natal Argentina y de la que se enteró cinco minutos antes de ofrecer un concierto en el hotel Hilton, cuando le entregaron un telegrama donde le informaban sobre el infausto acontecimiento.
"Yo no sé lo que canté aquella noche (si es que canté); no sé lo que ocurrió aquella noche (porque estaba totalmente obnubilado) porque mi alma había salido del cuerpo y estaba flotando en el espacio de alguna forma", relató el celebrado músico, compositor y cantante argentino.
Alberto Cortez hizo un breve repaso de su vida artística y personal, al conversar el miércoles con comunicadores de esta ciudad, en la sala "Moisés Zouain" del Gran Teatro del Cibao, donde la noche de este viernes ofrecerá un espectáculo, con la dirección musical del dominicano Amaurys Sánchez. En el encuentro, recibió de manos de funcionarios del Ayuntamiento de Santiago, una resolución que lo acredita como "Visitante Distinguido" de la ciudad.
Recordó que, al terminar la actuación de esa noche en Madrid, no recibió a nadie en el camerino y salió a caminar en una noche brumosa, regresando al hotel al caer el alba y, ya dentro de su habitación se sentó y escribió las palabras de "Cuando un Amigo se Va".
Abrumado por los recuerdos, mientras hablaba con los comunicadores santiaguenses, Alberto se remontó a sus años de infancia, para explicar por qué siempre ha considerado a su padre como el mejor amigo que ha tenido en su dilatada existencia.
"Desde cuando mi cuerpo empezó a echar un poquito de sombra detrás, más que mi padre, era mi amigo; me consultaba cosas inocentes de niños y yo le consultaba cosas fundamentales de grandes; le preguntaba cosas que lo sorprendían, pero siempre me respondía con la verdad", recordó.
CANCION PARA HOMOSEXUALES
La primera vez que interpretó "Cuando un Amigo se Va" fue en un concierto que ofreció en la capital mejicana y, en el transcurso de una rueda de prensa al término del show, también fue la primera vez que escuchó a alguien decir que esa podía ser una canción para homosexuales.
Fue uno de los periodistas que participó en el encuentro quien le hizo la observación, creencia que sorprendió enormemente a Alberto que, como cantante y compositor, estaba en esos tiempos comenzando a ser conocido en Méjico. Atribuyó la errada percepción del periodista a que, en esa época, los mejicanos no estaban acostumbrados a que un hombre le cantara a otro hombre.
UN CIGARRILLO, LA LLUVIA Y TÚ
Confesó ante el auditorio que conversó con él la tarde del pasado miércoles aquí, que todas sus canciones están basadas en historias y, obviamente, "Un Cigarrillo, la Lluvia y Tú" no es la excepción, tema que definió como "más que sensual, sexual". La compuso a la edad de 12 años, luego de tener seis años aprendiendo a tocar piano.
Dijo que un día, cuando llegó a su casa, le comunicó a su madre que había compuesto su primera canción y ella sólo atinó a decir: "Oh Dios, un Mozart en la familia; esto hay que presentarlo en la familia como Dios manda, por lo que voy a organizar un té en el salón de la casa y la presentarás a los invitados".
Así lo hizo especialmente frente a sus tías y, apenas escucharon las primeras letras, comenzaron a decir que era una canción pornográfica y la mayor de todas, que siempre lo defendió, dijo que eso no podía ser "porque en nuestra familia nunca ha habido un pornógrafo".
Alberto Cortez definió el tema "Un Cigarrillo, la Lluvia y Tú" como maravilloso "y no porque la compuse yo, sino porque la cantó Sergio Vargas a dúo conmigo, y porque me la interpretó Tito Rodríguez, que hizo del tema un éxito inmenso en toda América del Sur y el Caribe".