Alberto Fujimori toma lecciones de guitarra

SANTIAGO DE CHILE.-Alberto Fujimori es claustrofóbico. Por eso no ocupa el pequeño dormitorio de tres por tres que le asignó Gendarmería, una pieza típica de un aspirante a gendarme, con clóset, baño privado, tina y ducha con agua caliente. No soporta la sensación de encierro que le produce esa habitación y prefiere pasar la noche en el sofá del living privado que tiene en el recinto donde está detenido desde el 7 de noviembre pasado.

Cumplió cien días en prisión y hace poco recibió de vuelta su notebook, el mismo que traía a bordo del jet privado en que aterrizó sorpresivamente en Chile y que le requisaron cuando el ministro Orlando Álvarez ordenó su prisión preventiva, mientras dura el proceso de extradición.

En el computador tiene archivados sus discursos, escritos, mapas y otros documentos que ha revisado pensando en su regreso al Perú, donde enfrenta numerosos procesos por corrupción y violaciones a los derechos humanos.

Por estos días, su expectativa más cercana es trasladarse a una cómoda y ­extremadamente segura­ residencia en el barrio Los Domínicos, donde podría cumplir arresto domiciliario. Eso, si la Sala Penal de la Corte Suprema que revisará su petición le concede ese beneficio después que, el martes pasado, el ministro Orlando Álvarez se lo denegara.

El ex Mandatario está recluido en la Escuela de Gendarmería, un antiguo convento en el sector de Avenida Matta que fue acondicionado para la formación de los aspirantes a gendarme. No es propiamente una cárcel, sino un recinto educativo al que se han destinado ultimamente "presos vip" como Fujimori y los familiares del general Pinochet.

Fujimori permanece ahí desde que llegó de Japón, donde vivió cinco años tras escapar de Perú en 2000 y remitir su renuncia al palacio Pizarro por fax desde Tokio.

"Estos cien días han sido los momentos más duros para los hijos desde el divorcio de nuestros padres. Pero a nosotros los problemas difíciles como éste nos han hecho más fuertes, que nos queramos mucho más y estemos más unidos", declaró a El Sábado su hija Keiko Fujimori.

Keiko dijo estar satisfecha con el trato que recibe su padre de Gendarmería, "porque lo he visto bien, de buena salud y optimista. Hay un médico y una enfermera que lo revisan permanentemente para prevenir problemas hereditarios de hipertensión".

Las condiciones en que se encuentra el ex gobernante son más confortables de lo que oficialmente se admite. Y mucho mejores de lo que les gustaría a los enemigos de Fujimori, que quisieran verlo en el calabozo de un penal común. De hecho, Luis Silva Santiesteban, secretario general del partido fujimorista Sí Cumple, declaró después de visitarlo: "Él (Fujimori) se ve que cuenta con todas las comodidades en el lugar donde está recluido".

Según personas que lo han visitado, el ex presidente tiene suficiente espacio y libertad de desplazamiento en el área que habita: la planta completa del casino de oficiales de la Escuela de Gendarmería, aunque él está instalado en una terraza adosada al casino, que es cerrada. Incluso tiene un toldo manual para protegerse del sol. Esa dependencia es de un tamaño aproximado de 150 metros, donde tiene un living, televisión con cable, radio, equipo para ver videos y su escritorio. Allí recibe a sus visitas, a sus abogados y en ese lugar lo interroga el ministro Álvarez.

El casino tiene además un sector donde hay un bar ­desprovisto de alcohol­, mesas de ajedrez y de pool, donde permanecen los gendarmes que lo custodian. Fujimori almuerza en ese comedor, pero no permanece allí, porque tiene ventanales que dan al jardín y al patio principal de la Escuela de Gendarmería, y podría ser captado por cámaras fotográficas. Además, el espacio que ocupa comprende un segundo piso, donde está el dormitorio que le asignaron, pero sólo sube allí para usar el baño. No es el único a su disposición. Hay otros en el primer piso, donde a menudo entra a lavarse las manos, un rito que repite varias veces al día.

El lugar donde está detenido se encuentra tan aislado del exterior que cuando hay manifestaciones afuera o cuando estuvieron los Pinochet retenidos allí, Fujimori sólo se enteró por televisión. Tiene cerca una capilla, que él nunca ha pedido visitar.

No tiene la obligación de levantarse a determinada hora ni de encerrarse por la noche. Pese a eso, se levanta temprano y se mantiene ocupado durante todo el día. Fujimori evita tener momentos de ocio.

GUITARRA CON EL ABOGADO

La alimentación de Fujimori está a cargo de un "cocinero especial", como lo llamó el coronel Carlos Figueroa, director regional de Gendarmería. Pero además hay una nutricionista que vigila su alimentación, puesto que padece de hipertensión por lo que debe tener una dieta con poca sal. Ocasionalmente, él mismo ayuda a cocinar. Sus platos favoritos son de la gastronomía peruana y japonesa. La embajada de Japón le envía de regalo sushi y otros productos alimenticios peruanos y nipones para la elaboración de su comida. No todos los regalos son aceptados por Gendarmería. La candidata presidencial fujimorista Martha Chávez Cossío, quien lo visitó varias veces a fin de año, relató a "El Sábado" que un restaurant peruano ofreció enviarle la comida, pero no se permitió por razones de seguridad.

El día de Navidad y Año Nuevo Fujimori pudo cenar en familia. Gendarmería hizo una excepción y le permitió visitas nocturnas modificando los horarios habituales. Martha Chavez comió la noche del 31 de diciembre con el ex presidente. "Estaban sus hijas Keiko y Sachi y su yerno (Mark Villeneve). Cenamos a las 9 de la noche: pollo al curry con mucho arroz blanco que a él le encanta y bebidas gaseosas. Fue una reunión agradable, muy familiar, íntima, escuchándolo. Fui con mi esposo y mi hijita, de 11 años. Y fue tan grato poder hablar en la tranquilidad en que él se encuentra, cosas que nunca tuvimos oportunidad de hablar, por estar imbuidos en este trabajo político cuando él era Presidente. Lo hallé muy esperanzado, tiene voluntad de roca, está preparado para superar cualquier adversidad".

Sus cercanos cuentan que dedica gran parte del día a la lectura, especialmente cuando no recibe visitas. La prensa de Chile y del Perú, se la llevan cuando la pide. Además estudia los expedientes de sus procesos judiciales. También dispone de libros, pero según su vocero Carlos Raffo, más que ficción prefiere la actualidad peruana. "Se preocupa por saber la marcha de los programas que él implementó en agricultura y para combatir la situación de la pobreza".

También le permiten ver videos. Sus hijos y amistades le llevan cintas con el desarrollo de la campaña electoral en Perú, o filmaciones de lo que hacen sus hijos. Y también algunas películas, como el documental "The Fall of Fujimori", que hace poco se estrenó en Nueva York.

Fujimori es muy aficionado a la música. Desde el comienzo su abogado peruano César Nakasaki se encargó de que le llevaran una variedad de Cds, entre ellos algunos de ópera, que le gustan a su novia japonesa, Satomi Kataoka. El ex Presidente escucha canciones peruanas y, según revela Raffo, su favorita es "Todos Vuelven", que dice en su letra "todo vuelven a la tierra en que nacieron, al embrujo incomparable de su sol".

Últimamente, está tomando lecciones de guitarra. El abogado Francisco Velozo ­del bufete de Gabriel Zaliasnik, quienes lo representan en Chile­ le ha enseñado algunos acordes. Pero también estudia por su cuenta. "Nos ha mostrado unas hojas con sus letras de canciones, las copia de lo que escucha, las transcribe y está dándole a las notas", comenta su amiga Martha Chávez.

De la vida cotidiana de Fujimori en prisión, lo que más ha trascendido es su interés por la jardinería. Apenas llegó al recinto descubrió que había un patio trasero, bastante abandonado, que tenía sólo un níspero y suelo de maicillo. Pidió autorización para remodelarlo, lo que causó polémica y al principio, se la negaron. No obstante, durante la visita que le hizo el Director Nacional de Gendarmería Juan Carlo Pérez y el subdirector Carlos Puccio, hermano del vocero de gobierno ­la que provocó escozor en el gobierno peruano­ le comunicaron que se le permitiría arreglar el jardín.

Fujimori no se puso overol ni cogió una pala y un rastrillo. Más bien dirigió la obra de paisajismo que se realizó en ese espacio y que fue financiada por el ex gobernante y sus amistades. Lo convirtió en un auténtico jardín japonés indicando él mismo a personal de Gendarmería dónde había que instalar la cerámica, el césped, poner la iluminación y cultivar las especies que plantó, rosas, limones y un olivo. "El ingeniero Fujimori ha prometido que volverá a visitar ese jardín", señala Carlos Raffo y hasta piensa instalar allí una placa recordatoria.

TRATO PRESIDENCIAL

A pesar de todo los fujimoristas estiman que, si bien recibe un trato digno, está sometido a un régimen muy estricto. "No está garantizado su derecho a la libertad de expresión. No tiene internet ni teléfono y nada escrito por él puede salir", subrayó el abogado Nakasaki. A Martha Chavez le requisaron un libro escrito por Fujimori que llevó para que se lo autografiara, sólo porque él escribió algunas líneas.

Esas medidas apuntan a impedir que el ex Presidente utilice Chile como plataforma para intervenir políticamente en las elecciones peruanas. Sin embargo, la sola cercanía de Fujimori a su país logró alterar el mapa electoral.

La legisladora fujimorista Marta Moyano, comentó a "El Sábado": "Gendarmería cumple las normas. No se permite ingresar celulares ni documentos. Hay que pasar por un detector de metales y una gendarme examina hasta la cartera. Está muy vigilado, como un preso, y ya han pasados tres meses, debería estar en libertad".

La vigilancia de Fujimori está a cargo de la Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios (Usep), efectivos de seguridad de Gendarmería, que reciben órdenes de un capitán, quien maneja hasta la llave del refrigerador del ex líder peruano. Personas que lo han visitado aseguran que los gendarmes le dan un trato muy respetuoso, y que incluso algunos funcionarios lo llaman "Presidente". El abogado César Nakasaki no recuerda haber escuchado esa palabra, "pero sí se dirigen a él con venia". Para el profesional, el trato es acorde a su condicion de ex Presidente. "Vi que estaba más cómodo que en una cárcel común, pero se le da un trato duro. A mí, siendo su abogado, me trataban como visita, leían mis escritos jurídicos, no podía estar a solas con él. Las visitas deben estar inscritas en una lista aprobada por el Director de Gendarmería y por el ministro Orlando Álvarez".

No existe en derecho internacional una norma escrita que regule el trato hacia un ex gobernante privado de libertad. Sin embargo, por tradición, en general se les conceden condiciones especiales y hasta arresto domiciliario.

El ministro Orlando Álvarez explicó a "El Sábado" que no se encuentra detenido en la Escuela de Gendarmería debido a su condición de ex Presidente, "sino por la notoriedad o gravedad de los hechos que se le imputan y la connotación internacional de las relaciones bilaterales entre Chile y Perú que este caso tiene y que así lo ameritan".

En cuanto a las condiciones de su encierro, el ministro precisa: "Si bien La Escuela de Gendarmería no es un lugar habitual de reclusión, la ley autoriza que sea utilizada para tales efectos y cumple con todos los requisitos de seguridad necesarios. Es un recinto de reclusión asimilable a Punta Peuco, Capuchinos, por citar algunos”.

Álvarez lo ha interrogado cuatro veces, por los doce cargos que presentó el gobierno peruano. El más grave es la matanza de 15 personaes en 1991 y el asesinato de nueve estudiantes y un profesor universitario, además de millonarios pagos a su ex asesor, Vladimiro Montesinos.

La embajada de Japón en Chile le presta la asistencia consular y monitorea el proceso judicial. El agregado de la sede diplomática, Hiroaki Kodama, señaló a "El Sábado" que "esta embajada ha actuado de manera normal, tal como lo haría con cualquier persona que tenga nacionalidad japonesa y se encuentre en similar circunstancia".

Lejos, en Japón, la madre de Fujimori, Mutsue Hinomoto, no sabe que su hijo está preso. A sus 93 años no está completamente lúcida y Rosa Fujimori, la hija con quien vive, evita darle noticias que pudieran afectarla.