SANTIAGO.- El carnaval de esta ciudad tuvo este domingo un cierre espectacular, complementado con la presencia de miles de personas provenientes de los más recónditos lugares de los sectores que conforman este municipio, agolpándose a todo lo largo de la avenida Las Carreras, escenario oficial de esa fiesta. La presencia de los protagonistas del show no fue adecuadamente calculada por los organizadores y, aunque el desfile comenzó en la hora prevista, todavía a las nueve de la noche estaban exhibiéndose, mientras la multitud de gente no se movía de sus puestos, disfrutando de aquel espectáculo.
Lechones, comparsas y carrozas dieron un tinte especial a lo que se vivió en ese lugar, demostrándose nuevamente el ingenio creativo de los que, tradicionalmente, han contribuido con ideas a la confección y preparación de grupos y particulares, que han engalanado el carnaval.
La efervescencia que se vivió en la avenida Las Carreras contrastó notablemente con lo acontecido en los tres domingos anteriores. Y es que, en esta oportunidad, los lechones y las comparsas (materia prima del carnaval santiaguense) accionaron a toda capacidad. Sus vistosos coloridos y espectaculares disfraces dieron un matiz impresionante al colofón del que es considerado como “el real carnaval” que se celebra en el país.
Las comparsas tradicionales se conjugaron en esta ocasión con las muestras populares de su género que, en esta temporada, emergieron de las mentes creativas de los nuevos exponentes de la fiesta carnavalesca. Nuevos modelos de caretas se confundieron con aquellas que el paso del tiempo no ha logrado convertirlas en cosas del pretérito, entremezclándose las tradicionales joyeras y pepineras, con las no menos atractivas originarias de Pueblo Nuevo y Los Jardines Metropolitanos.
Si extraordinaria fue la presencia de santiaguenses en el sitio donde se produjo el desfile, no menos impresionante fue la cantidad de gente que siguió las incidencias a través de todos los canales de televisión locales que, de manera simultánea, teledifundieron los pormenores de lo que acontecía en la avenida Las Carreras.
Como de costumbre, el área monumental se convirtió en epicentro de esa diversión popular. Y es que es precisamente en sus alrededores donde se colocan las tarimas que sirven de plataformas para la presentación de grupos, que le confieren el toque musical a esa fiesta del pueblo.