SEVILLA.- En los próximos días está previsto que se inicien los trabajos de rehabilitación del que fuera pabellón de la República Dominicana en la Exposición de 1929, cuyo coste se acerca a los 670.000 euros y el plazo de ejecución será de un año.
El inmueble, situado en la avenida de la Palmera, pasó a ser propiedad del Ayuntamiento tras la Exposición Iberoamericana aunque durante bastantes años estuvo cedido como sede de la Demarcación de Carreteras del antiguo Ministerio de Obras Públicas. Tras vencer el plazo de concesión y al revertir su uso al Ayuntamiento, éste decidió acometer una serie de obras para rehabilitar este singular inmueble y, al mismo tiempo, acondicionarlo para su nuevo uso: oficinas municipales.
Aún no se sabe qué dependencias del Ayuntamiento serán las que se trasladen al lugar, pero la delegada de Hacienda, Inmaculada Muñoz, recordó que en la actualidad varios de los servicios municipales se ubican en instalaciones por las que se paga un alquiler del que la Corporación se quiere liberar y que también habrá que buscarles una ubicación a las dependencias de la calle Almansa, que la Corporación volverá a sacar a subastar.
A la espera de decidir qué dependencias se trasladarán al lugar, el Ayuntamiento inició hace unos meses la tramitación del expediente de las obras que adjudicaría por el procedimiento de subasta pública. Se presentaron cuatro empresas y, tras la exclusión de una de ellas por no cumplir los requisitos, la mesa de contratación de Hacienda decidió adjudicar el proyecto a la que ofertó el menor precio. Al final el presupuesto de la obra ha quedado establecido en 669.886,54 euros y su plazo de ejecución en doce meses.
Profunda rehabilitación
El proyecto en sí persigue rehabilitar el antiguo pabellón y también redistribuir su espacio para un mejor funcionamiento, algo que facilita, recordó la delegada de Hacienda, el que su uso anterior haya sido el de sede de una administración pública.
El edificio, de planta rectagular en dos alturas y cubierta plana, tiene una superficie en torno a los 4.340 metros cuadrados, de los que 365 están ocupados por el pabellón propiamente dicho y el resto por otras construcciones y un área ajardinada. En total la superficie construida es de 710 metros cuadrados, de los que 344,55 corresponden a la planta baja y 365,45 a la planta alta.
Como se persigue la rehabilitación integral del edificio, ello supone que el proyecto plantee la sustitución de cubierta, pavimentos, carpinterías, acabados e instalaciones. Además, se eliminarán las mamparas divisorias existentes en el inmueble para dejar instancias más diáfanas y adecuadas a su nuevo uso.
El proyecto prevé asimismo sustituir los vuelos de los dos balcones del edificio y modificar los huecos de fachada de la planta baja con el objeto dar luz natural y ventilación al nuevo despacho de recepción y control que se creará en la zona de la entrada. Los trabajos prevén también dotar de ascensor y sala de instalaciones a un inmueble en el que además se realizarán las obras necesarias para, de acuerdo a la normativa, instalar rampa de accesos para minusválidos así como aseos y pasos adaptados para éstos. Las obras de adecuación de este antiguo pabellón del 29 incluyen asimismo la urbanización de la zona que da a la avenida de La Palmera.