El carnaval dominicano es una de las tradiciones más coloridas y celebraciones más alegres de la República Dominicana. En el mismo participa todo el pueblo, que se lanza a las calles a disfrutar, compartir y celebrar con alegría. En la celebración del carnaval dominicano se aprecia, en particular en los atuendos y disfraces una mezcla muy variada por regiones de elementos y tradiciones africanas traídas por los esclavos trasportados al nuevo mundo y las costumbres y ropajes europeos de sus amos y colonizadores.
Se confunden en las festividades los diablos cojuelos, con sus trajes de capa cubiertos de espejos, cascabeles y cencerros, que ridiculizan a los señores medievales, con los platanuses y otros disfraces netamente africanos, así como un sinnúmero de manifestaciones de la creatividad popular. El Carnaval es la fiesta popular de mayor tradición de la Republica Dominicana. Se produce desde la colonia, en víspera de la cuaresma cristiana, cuando los habitantes de Santo Domingo se disfrazaban como un remedo de las carnestolendas europeas. Si desde el siglo XV1 *hubo mascaras en la ciudad de Santo Domingo*, lo cierto es que la tradición colonial creció con las gestas republicanas del 27 de febrero de 1844 y del 16 de agosto de 1865, al punto de que casi desde entonces los carnavales se celebran en estas fechas.
En los últimos años, y en particular a partir 1997, las autoridades gubernamentales han buscado separar la celebración de las fiestas patrias de la celebración del principal carnaval dominicano, para no restar solemnidad a la celebración de la independencia nacional el DIA 27 de febrero. Como resultado la segunda mitad de febrero presenta una intensa agenda de actividades separadas en conmemoración de la lucha patriótica de los héroes de la independencia nacional y alrededor del carnaval fiestas populares, conciertos multitudinarios, desfiles de comparsas, así como los tradicionales carnavales cada domingo del mes.
Algunos disfraces y personajes: El diablo cojuelo era un demonio travieso y juguetón que colmo la paciencia del mismo diablo y este lo arrojo a la tierra, lastimándose una pierna al caer, quedando cojo o *cojuelo*. Su disfraz ridiculiza el de caballeros medievales con capa y pantalones anchos de colores vivos y mascara representando un animal o rostro horrible y espantoso. *Se me muere Rebeca* representa a una madre desesperada que quiere llevar a su hija que se encuentra gravemente enferma. Va gritando todo el camino, de pronto se para, enseña a la hija (en representación una muñeca), mientras un coro le va respondiendo, se para en los colmados pide golosinas para la hija enferma, pero realmente las reparte entre los niños, que la siguen con insistencia.
Califa es un poeta criticón, que en versos va criticando en forma jocosa a todos los personajes de la vida política, social y cultural, es seguido por un coro y esta vestido de frac negro, camisa blanca y un gran sombrero negro. Los Africanos Personajes pintados de negro, con carbón y aceite quemado de carro, van grupos de hombres y mujeres, imitando a negros esclavos, bailando por las calles como parte del carnaval. Los indios también salen comparsas de niños de niños y niñas, así como de personas adultas, imitando a los antiguos habitantes de la isla, con plumas, arcos y lanzas, con todo el cuerpo pinto *llamándolos indios*. De una de estas comparsas se origino una representación teatral con un drama, que representa la relación de los españoles con los indígenas, que constituye la muestra más importante del teatro del carnaval. La comparsa con mas tradición que aun representa este drama se llama *la comparsa de San Carlos*, localizada en un popular barrio de Santo Domingo. La Muerte es la representación de una calavera, con todo y mascara, en la ciudad de Santo Domingo, acompañaba tradicionalmente a los diablos y recibe tradicionalmente el nombre de la *Muerte en Jeep*.
Por ultimo resaltamos *Los Ali Baba* que son comparsas con motivaciones orientales, cuya característica principal es una sincronizada coreografía van bailando con todo el cuerpo al ritmo básico que le dan los redoblantes y bombos dentro de una marcada influencia de los *cocolos* de san pedro de Macorís. Es sabido que el sentido cristiano de los carnavales va totalmente ligado a la cuaresma, y representan la despedida de la carne *carne vale= carne, adiós), por eso es mas llamativo que puedan celebrarse estas fiestas fuera del contexto en que se justifican en nuestra cultura. Pero los carnavales vienen de mucho más lejos. El uso de mascara y disfraces es tan antiguo como el hombre, tiene en su origen un sentido mágico, y es independiente de la fiestas en que nosotros las hemos colocado.
Miosotis Grullón