MADRID, España. En cualquier actividad de la vida para vencer hace falta: La unidad. Esto a propósito de la consecución de la homologación del carné de conducir dominicano por el español Unas de las promesas realizadas en las visitas que realizó en campaña ha España el hoy presidente dominicano doctor Leonel Fernández, fue gestionar que se homologara la licencia de conducir dominicana con el Gobierno español.
A casi dos años de gobierno peledeísta está conquista no ha sido posible, por las diferencias existentes entre el embajador dominicano, don Alejandro Gonzáles Pons, y el cónsul General dominicano, licenciado Marcos Cross Sánchez.
En las fiestas patrias que llevó a cabo el Consulado General en Madrid, que encabezó el cónsul criollo, Cross Sánchez, fue notoria la ausencia de la máxima representación diplomática en el acto, don Alejandro González Pons. Pero, sobre todo, porque en esa fiesta participaron grandes autoridades españolas, entre la que podemos citar a la Presidenta de la Comunidad de Madrid, doña Esperanza Aguirre.
En ese acto en el que se reunió un gran número de dominicanos, el Cónsul aprovechó y manifestó la necesidad de que las autoridades españolas hagan una tangible realidad la homologación del carné de conducir dominicano por el español.
Para sorpresa de quién escribe, después de pasar algún tiempo de la solicitud realizada por Cross Sánchez, salió publicado en el diario español matutino, " La Razón" de fecha 9/3/2006, la siguiente información de dónde extraigo el siguiente párrafo: "Aguirre pedirá al Gobierno que valide el carné de conducir de bolivianos, dominicanos y filipinos. Los residentes procedentes de Bolivia, República Dominicana y Filipina representan más del 4% del total de residentes extranjeros en nuestro país. En lo que se refiere a la comunidad de Madrid supone el 7% de los que viven y trabajan según datos que aporta el Partido Popular, en la región residen más de 50 Mil residentes dominicanos".
De esos datos uno concluye la importancia de que la homologación del carné dominicano debe ser aprobada cuanto antes, y que las autoridades dominicanas deben aunar esfuerzos en esa dirección. Sin embargo, los dominicanos y dominicanas esperan que los funcionarios se apoyen uno al otro, porque en cualquier actividad de la vida para vencer hace falta la unidad de voluntades.