BOSTON, Massachusetts.-Las remesas que recibe América Latina han crecido, pero no han logrado disminuir la pobreza en la región establece la Cepal. Pese a que el crecimiento de la remesas se ha constituido en una de las principales fuentes de financiamiento externo para los países latinoamericanos, su repercusión ha sido “poco significativa”, como arma en el combate de la pobreza que afecta a la población de la región, según afirma un estudio de la Comisión Económica para América Latina –CEPAL-.
El informe, también expresa que la Republica Dominicana, junto a El salvador y Guatemala, reciben un 20 por ciento del total de las remesas enviadas por sus ciudadanos desde los paies hacia donde han emigrados en busca de mejor suerte y garantizar un futuro económico para sus familias. México, Brasil y Colombia captan más del 60 por ciento de las remesas enviadas a la región, señala el informe de la CEPAL.
El documento de la CEPAL, denominado “Migración Internacional, Derechos Humanos y Desarrollo en América Latina y el Caribe, será discutido por delegados de los gobiernos representados ante el Trigésimo Primero Periodo de Sesiones del organismo, reunido en Montevideo, Uruguay desde el 20 hasta el 24 de marzo.
Las remesas reflejan –indica el estudio- la vinculación de los trabajadores migrantes y son un apoyo a las economías nacionales que desafían las políticas públicas en los países de la región. Los trabajadores migrantes representan el 14 por ciento en la economía dominicana, mientras que en la de El Salvador, es el 10 por ciento. En naciones como Haití, Nicaragua y Honduras representan el 24, el 11 y el 10 por cientos, respectivamente.
La utilización de las remesas, su medición, los costos de transferencias y el potencial productivo todavía son temas de debate, señala la CEPAL, que asegura que un reciente estudio “indica que su repercusión en término de pobreza en toda la población es poco significativa, sin bien para los hogares que las reciben son ingresos estratégico”.
AUMENTA LA MIGRACION
En el documento se establece, que la Republica Dominicana esta entre los nueve países de la región –los otros son Argentina, Brasil, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití y Perú- donde mas de medio millón de sus habitantes han emigrado hacia otras naciones, y una de las naciones donde poco menos del 10 por ciento de su población reside en exterior. Entre los paies donde mas de un millón de sus nacionales han emigrados, se encuentra México, Colombia y la Comunidad del Caribe.
En ese sentido, los Estados Unidos continua siendo el destino preferido de la gran migración,, pasando de 18 millones de migrantes provenientes de la región en el ano 2004, a ser la primera minoría étnica en territorio norteamericano junto a sus descendientes nacidos en esa nación, donde casi la mitad de los latinoamericanos y caribenos vive indocumentada.
Pese a que los ciudadanos utilizan la migración como una salida a la falta de empleos y de oportunidades en sus respectivos países, esta acarrea crecientes riesgos y vulnerabilidades a sus derechos, sobre todo en las travesía hacia donde se dirigen o durante el proceso de repatriación.
Se calcula, que la mitad de los migrantes, actualmente, son mujeres que emigran solas en busca de oportunidades labores y, por lo general, se emplean en el servicio domestico.
La migración calificada sigue causando perdidas para los países emisores, y el potencial beneficio a través de la circulación y del retorno no parece materializarse. En todo caso, existen iniciativas en varios países para establecer vínculos con sus comunidades de emigrados y apoyar redes científicas asociadas a las diásporas.
La situación de los países de economía más pequeñas preocupada por la emigración de profesionales, especialmente de sus enfermeras y profesoras.
