SANTIAGO.- De manera sorpresiva, el mayor general Bernardo Santana Páez, jefe de la Policía Nacional, se presentó hoy a la sede de esa institución, cuando esta ciudad ha sido escenario en los últimos días de desórdenes callejeros, a causa de la muerte de tres personas en Pueblo Nuevo. La presencia del jefe policial se produce en el momento en que va en aumento la demanda de diferentes sectores de la sociedad santiaguense, que solicitan sea trasladado el general Luís Darío de la Cruz Consuegra, director del comando Cibao Central de esa institución.
El mayor general Santana Páez, al hablar con los periodistas en esta ciudad, alegó que sencillamente hizo una escala aquí, pues realmente salió de la capital con destino Puerto Plata.
Cuando los comunicadores le hicieron saber que existe un movimiento de opinión pública creciendo, que pide el envío a otro lugar del general de la Cruz Consuegra, el incumbente policial se limitó a decir que “estamos estudiando el pedido de traslado”.
Al inquirírsele su posición, en torno a los hechos de sangre ocurridos el lunes en la noche en Pueblo Nuevo, el mayor general Santana Páez declaró que “determinaremos las sanciones y para eso estamos investigando”.
HABLA DE LA CRUZ CONSUEGRA
De su lado, el general de la Cruz Consuegra consideró que, todos los que reclaman su traslado “lo hacen porque estoy combatiendo la delincuencia y el narcotráfico y parece que ellos están metidos en cosas malas”.
Sin embargo, dijo que es obediente a las decisiones que tomen el Presidente Leonel Fernández y el mayor general Santana Páez, por lo que aceptaría sin problemas que lo envíen a otra plaza.
De la Cruz Consuegra aprovechó la oportunidad para negar que las tres personas que resultaron heridas en los incidentes del jueves, fueran alcanzadas por disparos de las patrullas policiales. Se refería a los jóvenes José Nicolás Acosta y Franklin Méndez, alcanzados por proyectiles en sus piernas izquierdas y el niño Dámaso Silverio, quien recibió un balazo en la cara.
El oficial policial basó su negativa en que los agentes policiales sólo disponían de balas de goma “y las heridas fueron provocadas por proyectiles”.
De la Cruz Consuegra dijo lamentar la muerte de Miguel Angel Paulino Reyes, Janet Polanco Caba y la niña Elizabeth Polanco, pero la justificó al decir que “tarde o temprano, todos vamos a morir”.
El comandante policial del Cibao Central tácitamente dio crédito a la versión que dieron los dos rasos involucrados en los hechos, al asegurar que ellos “perseguían un bandido (Paulino Reyes) aunque ese fue un hecho fortuito”.