GINEBRA.-República Dominicana es el país de Latinoamérica que ofrece menor atención a sus enfermos del sida según hace constar un informe dado a conocer este martes por la Organización Mundial de la Salud (OMS), reseñado por la agencia EFE
Mientras que América Latina y el Caribe es la región del mundo en desarrollo donde el tratamiento contra el sida está más extendido, ya que tiene acceso a él cerca del 68 por ciento de los enfermos que lo necesitan.
Concretamente, trece países de la región proporcionan tratamiento a más de la mitad de la población que lo necesita: Cuba al cien por cien, Panamá al 97 por ciento, Barbados al 95, Venezuela al 84, Brasil al 83, Argentina al 81, Costa Rica al 80, Chile al 75, México al 71, Uruguay al 69, El Salvador al 59, Jamaica al 56 y Perú al 52 por ciento.
En cambio, Colombia alcanza al 44 por ciento de quienes necesitan tratamiento, Guatemala al 43, Ecuador al 42, Trinidad y Tobago al 38, Honduras al 35, Paraguay al 29, Haití al 20 y República Dominicana al 17 por ciento.
En el informe sobre la situación del sida en el mundo, elaborado en colaboración con el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), la OMS detalla que a finales de 2003 recibían tratamiento en la región cerca de 210.000 personas.
Dos años después esa cifra aumentó a 315.000, lo que representa el 68 por ciento de las 465.000 personas que se calcula que necesitan tratamiento en la región.
Con ese aumento del 50 por ciento en dos años, se ha logrado un grado de cobertura del tratamiento del sida desconocido en ningún otro lugar del mundo en desarrollo, donde la media es del 20 por ciento.
Para tratar a los enfermos en la región -donde dos tercios de los infectados son hombres, hay unos 1.811 centros (1.557 declarados y otros 254 calculados por las agencias de la ONU), lo que quiere decir que cada uno atiende a una media de 174 pacientes.
Se calcula que en Latinoamérica hay 1,8 millones de personas portadoras del sida, después de que en 2005 se contabilizaran 200.000 nuevos contagios y 66.000 muertes.
En el Caribe, el número de personas infectadas es de 300.000 y aumenta a un ritmo de 50.000 al año, mientras que el virus fue responsable de 24.000 muertes en 2005.
Respecto a la incidencia de la enfermedad entre los niños, el informe detalla que el 8 por ciento de los enfermos que reciben tratamiento en la región son menores de 15 años, frente al 10 por ciento de la media del mundo en desarrollo.
Por países, los porcentajes varían desde el 15 por ciento de Panamá, el 12 de Honduras o el 10 de Argentina, hasta el 2 de Perú, el 4 de Venezuela, el 5 de El Salvador o el 6 de Brasil.
En su informe, la OMS destaca además que el 80 por ciento de las personas consumidoras de drogas inyectables que recibían tratamiento antirretroviral a finales del año pasado en todo el mundo vivían en Brasil, un país entre los que más tratamientos proporcionan a ese grupo de población.
Mientras en América Latina se ha logrado una cobertura del sida de un 20 por ciento, en el Africa subsahariana ese porcentaje es del 17 por ciento, en el sudeste asiático del 16, en Europa y Asia central del 13 y en Oriente Medio y el norte de Africa del 5 por ciento.
Los responsables del informe calculan que en los próximos dos años, la región necesitará invertir cerca de unos 9.370 millones de dólares para combatir la expansión de la enfermedad, lo que representa el 17 por ciento de la financiación que requerirá el conjunto del mundo en desarrollo (unos 55.100 millones de dólares).
De esa cantidad global, el 55 por ciento tendría que ser invertida en el Africa subsahariana, donde se encuentra el 75 por ciento de la población afectada por el virus en los países con ingresos medios y bajos.