Santo Domingo.RD.-El Consejo Nacional de Drogas designó como nueva presidenta a la doctora Mabel Féliz Báez, en cumplimiento con una disposición emitida por el Poder Ejecutivo mediante el decreto número 89-06, en donde sustituye al Mayor General José Aníbal Sanz Jiminián.
Feliz Báez, al asumir la nueva posición se comprometió a desarrollar una labor en procura de detener el consumo y tráfico de drogas en el país, además de continuar trabajando mancomunadamente con la Dirección Nacional de Control de Drogas, revisando y empleando estrategias contra esta problemática nacional.
Expresó que “nuestra gestión estará orientada a poner en marcha planes y programas para frenar la distribución ilícita de narcóticos a nivel nacional, así como el lavado de activos, además de proteger a los niños y jóvenes, como los segmentos sociales más vulnerables a los que ataca el flagelo”, agregó.
La nueva titular, quien es la primera mujer en ocupar la presidencia de esta institución, es doctora en Derecho, egresada de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, y tiene una amplia formación en este renglón y las Relaciones Internacionales, ocupando varios cargos en la embajada dominicana en Roma, Italia. Hasta la fecha se había desempeñado como consultora jurídica del Consejo Legal del Instituto Dominicano de las Telecomunicaciones, INDOTEL.
Ha sido Catedrática de la Universidad Tecnológica de Santiago, UTESA, impartiendo varias asignaturas relacionadas al derecho civil dominicano, siendo distinguida en varias ocasiones en reconocimiento por sus aportes a la enseñanza y la formación de nuevos profesionales en el país.
También ha sido propulsora de importantes movimientos y clubes culturales, realizando una intensa labor en programas radiales de educación en Barahona, su pueblo natal.
Feliz Báez ha sido colaboradora de varios periódicos nacionales y extranjeros sobre temas de derecho y se encuentra actualmente en la fase final de la redacción de dos libros sobre el tema, titulados: “Contrato de Crédito en la República Dominicana” y “La solución de controversias a la luz del Arbitraje Comercial Internacional”.
Su vida pública la ha enfocado hacia la aplicación y protección de los derechos del ciudadano dominicano, especialmente de los jóvenes de baja formación académica y de los estratos sociales más frágiles.