SANTO DOMINGO.-Con motivo de Semana Santa y propiciando el espíritu de Solidaridad Cristiana el Programa de Solidaridad del Despacho de la Primera Dama realizó una Eucaristía de acción de Gracias en la Iglesia San Juan Bosco.
La primera Dama Margarita Cedeño de Fernández encabezó la actividad religiosa que contó con la presencia de César López, Director de los Comedores Económicos y el Dr. Alejandro Hernández Pizzaglio del Hospital de la Fuerza Aérea Dominicana, entre otros funcionarios y amigos del Despacho.
La primera palabra fue proclamada por Miguel Peguero Calzada del libro del Profeta Isaías 50:4-9. En la que hace presente la ayuda y solidaridad de Dios con su pueblo “Porque Yaveh el Señor me ayudará, por tanto no me avergoncé; por eso puse mi rostro como un pedernal, y sé que no seré avergonzado.
El padre José Pastor Ramírez proclamó el evangelio del evangelista Mateo 26:14-25 donde hizo reflexión en torno al tema de la traición de Judas, considerando que el alejarse de la gracia de Dios hace que no valoremos el sacrificio que hizo por la humanidad.
Definió la solidaridad como la homogeneidad e igualdad radicales de todos los hombres y de todos los pueblos, en todos los tiempos y espacios que constituyen una unidad total o familiar y que no admite en su nivel genérico diferencias sobrevenidas antinaturales.
Explicó además que la solidaridad se enriquece y alcanza su plenitud cuando se le adhiere la virtud de la caridad, realizada por amor y se convierte en entrega. “Ya que nadie ama más que el que da su vida por sus hermanos”.
El cura puso como ejemplo de solidaridad a la Madre Teresa de Calcuta en nuestros tiempos, quien no conoció límite alguno para esa entrega personal a los necesitados.
Felicitó a la Primera Dama Margarita Cedeño de Fernández por su gran sentido de solidaridad que expresa en los distintos programas que realiza desde su Despacho, por su dedicación a la niñez y a los jóvenes.
Y le exhortó a no tener miedo en continuar invirtiendo recursos económicos, energía y su propia vida por la educación, la nutrición y la medicina preventiva a favor de nuestros jóvenes, niños y madres solteras.
Resaltó que para que un acto pueda ser considerado solidario deben darse cuatro elementos fundamentales, primero que sea materialmente solidario, segundo que este fundado en la convicción de igualdad, tercero que se realice por caridad, por amor al prójimo y cuarto que se haga con rectitud de conciencia.
El padre Pastor Ramírez destacó que la Solidaridad no es una serie de actos aislados encaminados a ayudar al prójimo, es una actitud personal, una disposición constante y perpetua de tomar responsabilidad por las necesidades ajenas.
El religioso oró a Dios Padre a través de su hijo Jesucristo y con la fuerza del Espíritu Santo a favor de la Iglesia, los obispos y sacerdotes para que aprendan de Jesús a ser solidarios. También presento a Dios los Gobernantes de América Latina.
Por los gobernantes de nuestro país, los que estaban reunidos en la Iglesia, por la Primera Dama para que pueda continuar desarrollando sus proyectos a favor de los más pobres.
Por los hombres y mujeres que han fallecido sirviendo a los demás, por las madres solteras. Por las niñas que están quedando embarazadas, por su educación para que sepan administrar su sexualidad.
