Como una bomba ha caído en el entorno de la UASD, la propuesta del gobierno que oferta un 20% de incremento salarial sustentable a partir del presupuesto del año 2006.
De inmediato el comité de huelga y sus principales representantes anunciaron el rechazo de la misma y anunciaron que la huelga continuará más allá del lunes 17 y que será finalmente, una asamblea conjunta de profesores y empleados convocada para el martes 18 a las 10 AM en el aula magna, la responsable de fijar posición definitiva en torno al futuro del movimiento.
Al principio de semana muchos sectores estaban convencidos de que la paralización sería insostenible más allá de la semana santa. De hecho, los dirigentes gremiales estaban confrontando problemas para contener sus miembros, ante el compromiso moral de definir el futuro del semestre y la suerte académica de los 154 mil estudiantes inscritos.
Pero la intervención gubernamental a través de la SEESCYT, ha fortalecido la posición de los radicales que tienen la disposición de levantar el paro únicamente, si de forma inmediata se decreta un aumento de 30% en los salarios.
La situación del rector luce incierta. Por un lado ha decidido enfrentar a los gremios, al tiempo que sostiene una fuerte disputa con los organismos peledeístas que operan en la universidad.
Roberto Reyna llegó a la posición que ostenta con el respaldo del Partido de la Liberación Dominicana. Pero a partir del mes de Febrero entró en conflicto con esa fuerza, con el detonante de una auditoria realizada por la Cámara de Cuentas en que se revelaban anomalías en el economato universitario, dirigido por miembros de ese partido.
Reyna relevó de sus cargos a sus ex aliados tanto en el economato como en la dirección de bienestar estudiantil y el colegio universitario. A partir de ese momento los Peledeistas le declararon la guerra y apoyaron con entusiasmo, primero las paralizaciones de empleados y posteriormente, la huelga indefinida proclamada de manera conjunta con el personal académico.
Si sus relaciones no han empeorado se debe al mensaje enviado por el presidente Fernández al incluir al rector en la comitiva que le acompañó en su viaje a Europa. Estando allí es cuando se decreta en el aula magna la paralización indefinida.
Lo que ocurra en la UASD a partir de la asamblea del 18 tendrá mucho que ver con lo que decidan los Peledeistas; que según se sabe propugnan por una suspensión pura y simple del movimiento. Si adoptaran este camino y vuelven a sumar fuerzas junto al rector, por directiva de Palacio Nacional, se prevé una división del profesorado en dos grandes bloques, con el consecuente alejamiento de posiciones académicas hacia una confrontación de carácter netamente político.