SANTO DOMINGO.- El más emblemático dirigente de la pelota dominicana, Domingo Ernesto Pichardo Vicioso (Monchín), falleció la madrugada de este martes en Miami, Florida.
El antiguo presidente de los Tigres del Licey, bajo cuyo mandato esa franquicia obtuvo gran éxito dentro y fuera del país, tenía 81 años a la hora de su deceso y aunque hace varios años que dejó la presidencia del equipo azul en los últimos años había tenido un acercamiento con los actuales dirigentes del club.
De inmediato la directiva del equipo azul, que preside el empresario José Manuel Busto (Pepe), lamentó la muerte del legendario dirigente deportivo y exclamó que la enseña azul no sólo está de luto sino que tiene un vacío emocional con su partida.
Sus relaciones internacionales con el béisbol organizado de los Estados Unidos y el béisbol del Caribe siempre lo puso al servicio de la enseña azul, en primer plano, y al béisbol dominicano, en sentido general.
Paradójicamente, no ingresó al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano como dirigente deportivo, sino como jugador de tenis de mesa.
De inmediato no se estableció cuando llegará al país el cadáver de Pichardo Vicioso y donde será expuesto a la comunidad deportiva antes de recibir cristiana sepultura.
A Pichardo le sobreviven su esposa doña Mirtha Peña, sus hijos Domingo Ernesto, José Andrés y Ricardo, y su hermano Horacio.