PUERTO PRINCIPE (Haití).- Calma y baja participación marcan este viernes la segunda ronda de las elecciones parlamentarias en Haití. La jornada había estado precedida de temores de que ocurrieran brotes de violencia política. También se preveía que la participación sería menor que en la ronda del 7 de febrero pasado.
"Mis colegas y yo hemos estado aquí desde las cinco en punto de la mañana, pero el único problema es que no tenemos suficientes votantes," declaró Josué Jonás, un funcionario de un local de votación en Puerto Príncipe.
El panorama parecía repetirse en muchos otros colegios electorales. De hecho, el primer ministro interino, Gérard Latortue, lamentó que la baja participación de los electores sea "una tradición en Haití".
Por otra parte, Latortue destacó que los electores "votan libremente" sin "tentativas de manipulación" y que no han ocurrido incidentes de violencia.
FIN DE LA TRANSICION
Estas elecciones marcan la conclusión del gobierno transitorio constituido tras la dimisión en 2004 del ex presidente Jean Bertrand Aristide, quien dejó el cargo en medio de protestas y del aislamiento internacional.
La jornada había estado precedida de temores de violencia política.
Según los analistas, estas elecciones determinarán si el presidente electo, Rene Preval, tiene el respaldo suficiente para gobernar el país más pobre de América.
La elección del Parlamento permitirá la toma de posesión de Preval el 14 de mayo, tras su victoria en las elecciones presidenciales y legislativas del 7 de febrero.
En la primera vuelta, sólo dos candidatos a diputados obtuvieron suficientes votos. Por esta razón, quedaron pendientes 97 escaños en la Cámara baja y el total de 30 en el Senado. Una gran cantidad de observadores internacionales supervisarán los comicios.
De igual forma ,se cuenta con la presencia de 9.000 integrantes de la fuerza de paz de las Naciones Unidas, que estarán encargados del mantenimiento de la seguridad durante todo el proceso.
APOYO PARLAMENTARIO
Preval, un ex aliado del ex mandatario Jean-Bertrande Aristide, expresó que sin el apoyo del Parlamento era muy poco lo que podía hacer.
El presidente electo ha propuesto una agenda legislativa con la que espera estabilizar el país. Unos 9.000 integrantes de la fuerza de paz de la ONU vigilan el proceso.
Los candidatos al Parlamento representan aproximadamente a una docena de partidos.
Similar a lo que ocurrió con las elecciones presidenciales, cuya realización se postergó en cuatro oportunidades, la fecha de las elecciones parlamentarias también tuvo que modificarse.
Por esta razón, la juramentación de Preval en el cargo también debió aplazarse para mayo.