Santo Domingo.-El jefe de la delegación de México que asiste a la Sexta Reunión de Procuradores Generales y Ministros de Justicia de las Amèricas (Remja VI) que se realiza en República Dominicana, definió como complejo el crimen por medios electrónicos, en especial por la Internet, y recomendó “hilar fino” a la hora de adoptar políticas para combatirlo.
Miguel Ángel González Félix dijo de igual modo, que resulta complicado combatir ese crimen conocido como Cibercrimen, debido a su diversidad y a que quienes lo cometen gozan de mecanismos sofisticados e inaccesibles para camuflarse y evitar ser ubicados, perseguidos y judicialmente procesados.
González Félix, quien representa a la Procuraduría General de México, sostuvo que la complejidad del Cibercrimen hace difícil también la adopción de políticas para combatirlo y planteó la colaboración de las naciones a los fines de que se adopte una convención global que permita que el fraude, la falsificación, la prostituciòn infantil, la trata y tráfico de personas, que se han puesto de moda por la Internet, puedan ser combatidos de manera más efectiva.
El jefe de la delegación México habló en una de las plenarias de Remja VI, donde se discutió ampliamente el tema del crimen organizado, la delincuencia transnacional y la necesidad de que se adopten mecanismos más efectivos para combatir ese flagelo que a costa de vidas y conspiración contra los estados, mueve y lava miles de millones de dólares al año.
Representantes de casi todas las delegaciones expusieron sobre el tema y coincidieron en la necesidad de que se renueven políticas en el marco de la cooperación internacional para combatir el Cibercrimen y otras acciones descabelladas de la delincuencia transnacional organizada.
En ese sentido de expresaron Canadá, Nicaragua, Perú, Brasil y República Dominicana a través de su jefe de delegación y presidente del cónclave, Francisco Domínguez Brito.
González Félix planteó aspectos fundamentales para la adopción de una política convencional para enfrentar el Cibercrimen, citando entre ellos, las tipificaciones, las experiencias y los obstáculos de carácter técnico y jurídico que se combinan para complicar la persecución y la acción penal.
Dijo que México ha trabajado mucho en esa materia, contando con expertos en cada ramificación del crimen cibernético, los cuales están a la mejor disposición de los países del hemisferio americano para fines de compartir experiencias y entrenamiento.
Sugirió que mientras se discuten políticas para la adopción de un protocolo regional o global, se utilicen los mecanismos que ofrece la Convención del Consejo de Europa (CoE), organismo intergubernamental en el que participan 43 países del viejo continente y naciones como EE.UU. en calidad de observadores.
Recordó que los primeros pasos de esa convención que puede servir de modelo para una eventual que se adopte en la región americana para combatir el Cibercrimen, se remontan a 1995 y que fue en el año 2001 cuando finalmente se aprobó.
Explicó que el modelo europeo consta de tres partes, como son la tipificación como delito de algunas actividades on-line; la vigilancia detallada por partes de las compañías operadoras de telecomunicaciones o servidores de Internet sobre tráfico en las redes, y la cooperación de los Estados en la investigación del Cibercrimen mediante la posibilidad de compartir informaciones
Además de Estados Unidos, la convención europea la firmaron Japón y Canadá también en su calidad de observadores.
Los Estados de otras regiones están estudiando esa Convención sobre el Cibercrimen para redactar sus propios tratados relativos al intercambio de datos de comunicación.
Dijo que la Convención sobre Cibercrimen de la COE ha sido propuesta como modelo de gobernanza de Internet para regular el delito electrónico más allá de las fronteras nacionales.