El presidente de Haití, René Preval, declaró que su objetivo es la unión de los hatianos. "Mi objetivo es la unión de todos los haitianos. No podremos avanzar si continuamos peléandonos", agregó. PUERTO PRINCIPE, (Xinhua) — René Garcia Preval toma posesión este domingo para un periodo de cinco años como presidente de Haití, el país más pobre del continente americano.
Garcia Preval, de 63 años, exhortó a los haitianos a la unidad para poner fin al caos político y la violencia que ha asolado al país durante años.
"Mi objetivo es la unión de todos los haitianos. No podremos avanzar si continuamos peléandonos", agregó.
El mandatario electo dijo que hará cuanto esté a su alcance para atraer inversiones extranjeras en un esfuerzo para reducir la pobreza en el corto plazo y ha exhortado a la comunidad internacional a que preste asistencia humanitaria y financiera a Haití.
Garcia Preval asumirá la presidencia durante una ceremonia en la Asamblea Nacional (congreso), a la que asistirán invitados extranjeros como el gobernador de Florida, Jeb Bush, hermano del mandatario estadounidense George W. Bush.
Otros invitados extranjeros incluyen a la ministra argentina de Defensa, Nilda Garré, y el vicepresidente brasilepo José Alencar.
El cambio de mando será vigilado por la policía local y los 9.000 hombres de la Misión de las Naciones Unidas para Haití (Minustah) desplegada en el país.
Puerto Príncipe, la capital de Haití, registra una relativa calma en comparación con la ola de violencia y secuestros que la asoló antes de los comicios presidenciales del 7 de febrero.
La Misión de las Naciones Unidas para Haití (Minusta) mantiene 9. 000 hombres en Haití para el mantenimiento de la estabilidad en el país.
Tras su toma de posesión, el nuevo mandatario tiene previsto asistir a una misa en la Catedral de Puerto Príncipe y por la tarde dirigirá un discurso a la nación desde el Palacio Nacional.
Garcia Preval dijo que impulsará el turismo y la agricultura para la creación de fuentes de trabajo y reducir el desempleo, abatirá la inflación, normalizará el suministro de electricidad, fortalecerá la seguridad y garantizará la libertad de prensa.
El mandatario electo ha sostenido intermitentes reuniones con políticos rivales, dirigentes civiles y representantes del sector privado.
"Mediante el diálogo y consultas permanentes, necesitamos construir una visión común de Haití y los esfuerzos de desarrollo para los próximos 25 años en el país", apuntó.
Haití, de 8.5 millones de habitantes, es el país más pobre del hemisferio, según la Organización de los Estados Americanos. Haití, de habla francesa, comparte con República Dominicana, de habla española, la mitad de la isla caribeña de La Española.
Según la ONU, Haití registra un desempleo de 33 por ciento y una mortalidad materna de 523 por cada 100.000 nacimientos, la más alta del continente, y el 49 por ciento de los niños asiste a la escuela. El 59 por ciento de los adultos están alfabetizados.
Haití registra la incidencia más alta del virus que causa el sida en el mundo occidental pues entre 4 y 5 por ciento de la población está infectada.
El país registra un veloz crecimiento demográfico de 2,6 por ciento anual, con una tasa de cuatro hijos por mujer.
La toma de posesión del mandatario electo estaba prevista para el 29 de abril pero fue aplazada para este 14 de mayo debido a la segunda vuelta efectuada el 21 de abril para elegir a los legisladores del congreso.
El futuro mandatario recibirá las riendas del poder del gobierno interino encabezado por el primer ministro Gerard Latortue y el mandatario Boniface Alexandré, quien le entregará la banda presidencial.
Garcia Preval, del partido La Esperanza, derrotó a una treintena de aspirantes en los comicios del pasado 7 de febrero. Garcia Preval es allegado al otrora mandatario Jean Bertrand Aristide quien fue derrocado el 29 de febrero de 2004.
Cuando sus partidarios protagonizaban movilizaciones que parecían desbordarse, las autoridades electorales, con apoyo de varios países, concedieron a Garcia Preval la victoria por mayoría con 51, 21 por ciento de los votos.
Garcia Preval, visto como un paladín por los pobres de Haití, fue presidente de 1996 a 2001, así como ministro del Interior y ministro de Defensa durante el primer gobierno del presidente Jean Bertrand Aristide.
Debido a dificultades técnicas, los comicios presidenciales y legislativos en Haití habían sido cancelados en cuatro ocasiones antes de su realización.
Garcia Preval dijo el 25 de abril que las malas relaciones entre Venezuela y Estados Unidos no afectarán los vínculos de Haití con ambas naciones.
En Caracas, el vicepresidente venezolano José Vicente Rangel dijo que su país envió a Haití un barco cargado con 100.000 toneladas de diesel y gasolina en apoyo al nuevo gobierno de Garcia Preval. Fin