SANTIAGO.- José Enrique Sued es lo que se llama “un síndico madrugador” pues, a las 5:30, cuando el alba apenas comienza a despuntar, “se ha tirado de la cama” para comenzar a monitorear, como político que busca estar al día de los acontecimientos, los programas que se transmiten por la televisión. Aprovecha el tiempo para, además, hojear los periódicos, según el mismo ha confesado durante su participación en espacios variados de radio y televisión de esta ciudad, aunque no es muy dado a abordar temas personales en sus entrevistas.
Mientras se pone al día con la actualidad, a través de los programas de televisión y la prensa escrita, el sindico comienza a alistarse para partir hacia el Ayuntamiento, a cumplir con sus obligaciones diarias. A su despacho acostumbra a llegar entre las ocho y las nueve de la mañana.
Ha sido uno de los funcionarios más responsables que ha pasado por el cargo, dicen empleados municipales, conocedores de las raras excepciones que Sued Sem ha dejado de asistir al cabildo durante su administración, iniciada el 16 de agosto del 2002. “Pocas veces ha faltado”, aseguran allegados.
Solo por algún malestar o por algún asunto inesperado se ha excusado, pero si está aquí en la ciudad y su salud está bien, nunca deja de presentarse, comentan seguidores que ven en Sued “a un hombre que predica con el ejemplo”.
“Si él es el primero que cumple, y es el sindico, entonces nosotros debemos imitarlo”, han dicho funcionarios.
LA FAMILIA
Sobre su manera de comportarse frente a sus semejantes, su forma de actuar y su actitud ante la vida, el sindico de Santiago asegura que viene de lejos. “Siempre he sido consciente, como hombre público, de lo que puedo hacer y no puedo hacer”, asegura convencido de sus palabras.
Las acciones que desarrolla en su vida personal y como funcionario, asi como dirigente político, son cosas que dice tienen mucho que ver con su formación y precepto familiar.
“La familia Sued Sem siempre ha sido muy unida, por el ejemplo que nos legaron nuestros padres ya fallecidos (Don Salvador y Doña Barbarita), comentó con nostalgia el sindico y candidato a la reelección con todas las posibilidades de ganar, según las encuestas.
Como ejemplo de la unidad que impera en torno a esta familia, el más conocido de los Sued reveló que, un encuentro con motivo de las pasadas navidades, congregó a 37 miembros de la misma.
El sindico es el quinto de ocho hermanos. “Me crié apegado a mi papá, Don Salvador, recuerda casi al borde de las lágrimas, lo que habla muy bien de su sensibilidad y de la gratitud que conserva hacia su progenitor.
Y recordó con profunda tristeza que su madre Doña Barbarita, mujer conocida por su filantropía en Licey al Medio, donde desarrolló gran parte de su vida, y luego en esta ciudad, a donde vino a residir luego, “nos pidió que siempre fuéramos unidos”.
“Hemos seguido su pedido al pie de la letra”, manifestó con satisfacción y orgullo José Enrique, quien ha liderado la familia Sued Sem, siendo una especie de protector.
Benny Sued, que es una destacada repostera, ha caminado de la mano de él. Es la única de la familia que se decidió a seguirle los pasos a su hermano en la política. Hoy en día es incluso candidata a diputada por la Gran Alianza Nacional (GANA) en Santiago, además de dirigir el Departamento de Parques y Plazas del Ayuntamiento.
VIDA RESERVADA
Sued ha llevado una vida reservada prácticamente. No se le ha involucrado en ningún escándalo. El actual sindico se cuida mucho de violar las reglas que impone la sociedad.
De ahí que pocos sean los comentarios negativos sobre su persona que se han desatado en Santiago, donde es uno de los más influyentes funcionarios y dirigentes políticos hoy por hoy.
ES CREYENTE
Sued, aunque respeta todas las religiones con las que ha colaborado desde su posición, se confiesa como un creyente católico “ciento por ciento”, pues fueron las enseñanzas que le conculcaron desde el hogar “las cuales pongo en practica. Hay muchos que son cristianos de boca, yo lo soy de corazón”.
Cada vez que puede va a misa y lo hace principalmente los domingos, que es la tradición de los católicos. Acude a distintos templos. Además, cuando inaugura una iglesia que se ha construido con sus aportes, por lo regular también se ofrecen celebraciones liturgicas.
“Soy un creyente en consonancia con los principios cristianos”, ha dicho en algunas de las entrevistas donde se han abordado esos temas. Pero, insistió, que a pesar de profesar la religión católica es un colaborador de las demás denominaciones cristianas a las que presta su ayuda “cuando me la piden y estamos en capacidad de ofrecer, claro”.
El Padre Ramón Dubert, fallecido hace algunos meses, es el “guía espiritual” del actual sindico, según confesó éste. Sentía por este sacerdote un gran afecto por lo que su muerte “me impactó ya que nadie la esperaba”.
CASOS ADVERSOS
Ha sabido caerse, pero ha podido levantarse. Es el propio Sued quien así lo confiesa. ¿Qué humano no ha caído alguna vez en su vida? Se pregunta. “Estamos compuestos de neuronas (que son los elementos fundamentales de la arquitectura nerviosa) por lo que no somos infalibles a experimentar alguna caída”.
Dice, por igual, el sindico que no le gusta ser hipócrita “ni aún en la política” donde admite “que se dan muchas cosas”. “A mi no me enseñaron a hablar mentiras. Si no puedo, no puedo, y ya”, agrega como para diferenciarse de ciertos políticos y funcionarios “que son especialistas en mentir, en practicar la demagogia”.
Muchas veces también aparecen personas que quieren burlarse y aprovecharse de los funcionarios y esto provoca que “el corazón se nos ponga duro, en algunas ocasiones”, como sucedió con Pedro Bretón, cuando era candidato al cargo hace varios años.
Ocurrió que una niña murió en un barrio popular de Santiago y un “vivo” se presentó con el cadáver de la menor frente a la residencia de Bretón, casi llorando, diciendo que era su papá y que no tenía para enterrarla, cuando todo fue un montaje, según se descubrió luego.
“Esos casos hacen que uno tenga que ser su reserva a la hora de ofrecer alguna ayuda”, aunque son casos particulares y no muy frecuentes. “Con todo y todo mi corazón, confieso al pueblo de Santiago, no se ha convertido en una piedra pues soy sensible y mi humildad, mi solidaridad, mi espíritu de colaboración la mantendré por encima de cualquier cosa”.
Sobre estado de animo prácticamente a horas de las elecciones, , se manifestó confiado en que volverá a ser nuevamente sindico por cuatro años más “ahora con más fe y seguridad porque va con el apoyo de la Gran Alianza Nacional (GANA) que conforman su partido, el PRSC, y el Revolucionario Dominicano (PRD), y cuando todas las encuestas lo dan como seguro triunfador del venidero proceso del martes.