LIMA.– A un día del debate entre los candidatos a la presidencia de Perú, la libertad condicional del ex presidente Alberto Fujimori y las declaraciones de su ex asesor Vladimiro Montesinos han complicado el ambiente político del país.
De acuerdo con analistas, la aparición de ambos personajes en la escena política en vísperas de la segunda vuelta electoral programada para el 4 de junio puede afectar los resultados.
El aspirante del Partido Nacionalista Unión por el Perú (PNUPP), Ollanta Humala, y el ex presidente y candidato del Partido Aprista Peruano (PAP), Alan García, debatirán este domingo en torno a la democracia, los derechos humanos, la corrupción y la lucha contra la pobreza.
En ese marco, los medios de comunicación peruanos coinciden en afirmar que los hechos relacionados con Fujimori y Montesinos pueden ser "claves" en el proceso electoral.
Fujimori, gobernante de 1990 a 2000, obtuvo el viernes su libertad condicional por parte de la justicia chilena aunque aún enfrenta en Santiago un pedido de extradición de Perú, acusado de crímenes de lesa humanidad, enriquecimiento ilícito, entre otros.
En sus primeras declaraciones tras ser liberado, el ex gobernante negó los delitos que le imputan.
Para Humala, la libertad provisional concedida a Fujimori en Chile es "motivo de preocupación" para los peruanos.
Por su parte, Montesinos, señalado como el "poder oculto" en el gobierno fujimorista, acusó a Humala de participar en el fraude electoral de 2000 que llevó a Fujimori a ceñirse por tercera ocasión la banda presidencial.
"Para la campaña se hicieron cambios de colocación en las Fuerzas Armadas, designándose al comandante Ollanta Humala como jefe del batallón del Grupo Antiaéreo (GAA) 501", indicó Montesinos en declaraciones grabadas por su abogada, Estela Valdivia.
Montesinos se encuentra recluido en la Base Naval del Callao desde junio de 2001 y procesado en más de 60 casos.
"(Humala) recibió la misión de conformar el grupo de personeros (de mesa) en la zona sur con reservistas o licenciados del Ejército. Es así que participó en la campaña de la reelección presidencial, habiendo cumplido a cabalidad con la tarea de reclutamiento", agregó.
"Esta situación le viabilizó su vinculación con los reservistas y con los órganos del sistema de inteligencia nacional", afirmó el ex titular del Servicio de Inteligencia Nacional (SIN).
Reiteró que el levantamiento de Humala en la localidad de Locumba, en el departamento sureño de Moquegua, cuando el gobierno de Fujimori colapsaba "fue una farsa".
"Es necesario relatar los hechos acaecidos en Locumba y la relación con mi salida del país", agregó, en la coincidencia en que ambos sucesos se dieron la misma madrugada del 28 de octubre de 2000 ". Montesinos se fugó a bordo de un velero desde el puerto del Callao.
Montesinos dejó entrever que el supuesto alzamiento se "prestó" para facilitar su salida del país.
En conferencia de prensa luego de que la televisión y la radio dieran a conocer las declaraciones de Montesinos, Humala expresó su "indignación".
"Queridos compatriotas, a través de los medios de prensa quiero expresar mi indignación por las declaraciones del sujeto Vladimiro Montesinos", señaló.
Negó que su presunto cambio de servicio de la localidad de Huancayo (centro andino) a Locumba (sur) tuviera que ver con la intención de favorecer la reelección de Fujimori. La afirmación "no tiene ni pies ni cabeza", argumentó.
Humala consideró que las declaraciones del "delincuente Montesinos" favorecen a García, por lo que se preguntó "cuál sería el trato" o la negociación entre ambos.
Humala y García se enfrentarán en una segunda vuelta electoral luego que en los comicios del 9 de abril pasado ninguno de los dos candidatos obtuvo el 50 por ciento más uno de los votos válidos para obtener la presidencia peruana. Fin