WASHINGTON.-Eso erosionaría su ganado prestigio como única opción al poder en 2008 y se debilitara al Banco Central de la República Dominicana en su capacidad de enfrentar una corrida cambiaria o bancaria al estilo 2003 Advierto que más allá del avasallamiento institucional que significa eso, no es prudente ni lógico políticamente para Leonel, reducir las reservas; eso erosionaría su ganado prestigio como única opción al poder en 2008 y se debilitara al Banco Central de la República Dominicana en su capacidad de enfrentar una corrida cambiaria o bancaria al estilo 2003; no podemos pagar, solo podremos abonar como mucho los intereses por deudas prioritarias que mensualmente son muchos dólares.
Si bien no es esperable una crisis en el corto plazo, éstas por lo general no se prenuncian. Recomendé en prensa que volvieran a rellenar las reservas rápido, ya que el escenario económico internacional se complicará hacia fines de 2006.
Hasta ahora, la autoridad monetaria compró y recibió gran cantidad de divisas repatriadas (más de 100 millones de dólares) y hoy está más sólido. El 2 de abril, en una columna en estas páginas y frente a la prédica de muchos economistas y analistas sobre "el fin de la crisis económica y de confianza provocada por el grupito PPH" y los méritos merecidos a Héctor, expuse que a partir de este segundo semestre las turbulencias externas se agravarían y eso complicaría también a la Rep. Dominicana.
Hace tiempo, en el tercer trimestre de 2005, el entonces presidente de la Reserva Federal de Estados Unidos, Alan Greenspan, se presentó en el Congreso de su país y dijo que todas las grandes crisis de la historia fueron precedidas por grandes auges de confianza y crecimiento del PBI.
En RD mejoramos nuestra situación pero no hemos salido de la crisis, falta aumentar más las recaudaciones, criminalizar la evasión y penalizar fuertemente a las mafias descubiertas por Cocco y Juan, creando controles al estilo GAFIC para evitar el lavado de dinero, cruzando información. Pero eso es material para mi otro aporte sobre el plan gestándose hoy, mientras escribo para presentarse al Congreso sobre evasión y secreto bancario antes de que venga la misión del FMI.
Me fascina conversar con maestros de la talla de Greenspan, ahora que ya no es Gobernador del Fed Board, es una Biblia andante y va a seguir ayudando y aportando al punto que ha fundado una empresa de consultoría y escribe actualmente sus memorias.
Su empresa consultora en Washington DC, no cree probable que haya un respiro en la presión de los precios de petróleo y recomendó en entrevista telefónica con el suscrito que si tenemos caña, usemos Etnol como petróleo. Importando la tecnología o creando un joint venture con Brasil, allá toda la flotilla funciona perfectamente con etanol y en RD hasta los triciclos tienen convertidores a gas subsidiado, en un país que de agricultor cañero pasó a hotelero.
Pero no producimos petróleo y éste no bajará de 70 el barril.
Esto quita sustento a las responsabilidades sociales que no se cubren por la volatilidad actual de los mercados y necesidades de prioritizar el gasto público. Los estimados son muy inciertos.
¿Qué medida usó Greenspan para superar un incipiente estancamiento económico y parálisis?
La Reserva Federal de Estados Unidos llevó las tasas de interés al 3.5 por ciento en 2003.
Esto coincidió con un fuerte aumento de la demanda de crédito por el creciente déficit del gobierno estadounidense, que la Fed se vio obligada a proveer emitiendo dólares para que la tasa no subiera. La exitosa reactivación adicionó una subida de la demanda de financiamiento por parte del sector privado, que nuevamente se proveyó con un aumento de la oferta de moneda.
El problema es que todos demandaban crédito para gastar y no para atesorar divisas. Por ende, no es de extrañar que la oferta excediera la demanda y el dólar se desvalorizara fuertemente desde 2001. A mediados de 2004, ante las presiones inflacionarias, la autoridad monetaria de Estados Unidos empezó a subir gradualmente sus tasas de referencia. Sin embargo, esta alza puede haber llegado demasiado tarde y sido demasiado lenta para evitar el crecimiento del excedente de emisión.
Por ello, la continua desvalorización del dólar que en 2005 potenció una caída de su demanda y la cobertura se cubrió con oro y DEG.
Lamentablemente, las fuertes ganancias que se hicieron en los mercados financieros y el incentivo de la actividad económica de esta abundancia de liquidez llevaron a los analistas e inversores a predicar el fin de las crisis.
¿Quién quería ver hacia adelante un mundo donde no fuese tan fácil ganar dinero o en el que las economías no crecieran tanto? Por ello, las turbulencias en los mercados continuarán de la mano de una mayoría de analistas e inversores que siguen empeñándose en encontrar en cada señal la posibilidad de mantener un enorme excedente de liquidez y no pagar las consecuencias.
Sin embargo, les guste o no, las tasas subirán por lo menos otro dos puntos y todos aquellos activos financieros e inmobiliarios que tuvieron un "boom" gracias a los excedentes de fondos verán recortar sus valores de la mano de una caída de la liquidez mundial. Lo que implica que RD para ser competitiva debe subir sus intereses so pena de inversionistas irse a depositar a EU y Panamá que ofrecerán más en certificados que nosotros.
No solamente nuestros políticos parecen haberse tentado con el slogan "el fin de la crisis heredada ha sido superado”. Técnicos también lo creen.
Esperar que mi amigo, Héctor Valdez Albizu, quien ha hecho una ardua labor, y quien debe consensuar m´ss con el Padre Alemán y el FMI para poder manipular las presiones externas y necesidades de cash del gobierno y sector privado, esas tareas parecen ser abrumadoras y es pedir milagros en un país donde las medidas que tomes o dejes de tomar afectan a todo un archipiélago de intereses económicos y de caudal político.
Quizás hoy estemos mejor posicionados para enfrentar el servicio de la deuda ya que serán nuestros hijos y nietos los que paguen, ya que "pateamos" el vencimiento de deuda para dentro de 10 años o más y así continuaremos hasta el final.