Aunque pueda parecer que nos estamos adelantando al tiempo y a los acontecimie- ntos, es necesario ver los que ya algunos comienzan a llamar la guerrita a lo interno del gobierno y del Partido de la Liberación Dominicana.
Muy pocos dudamos de la intención del Presidente de la República de optar por un nuevo períodos de gobierno, basado en lo que hasta ahora le permite la constitución de la República.
Y somos muchos los que advertimos la posibilidad de un enfrentamiento entre el más hábil estratega del Peledeismo gobernante, además del más poderoso e influyente funcionario del gobierno, candidato presidencial con el apoyo de Leonel en el pasado primer gobierno de los morados.
Me parece en lo personal que el cidadano Presidente de la República no está auspi-ciando enfrentamientos tempranos por la candidatura presidencial del PLD, pero que a sus espalda ya existe todo un andamiaje preparado para comenzar a buscar la repostu-lación eventual reelección del Presidente Fernández.
Todos conocemos de que por lo menos Jaime David Fernández Mirabal va a ir en bu-sca nueva vez de la candidatura, y que indiscutiblemente es un candidato potable, de una gran aceptación nacional, y un hombre fuera de serie dentro de la política nacional.
Danilo Medina perdió de un PRD con el cincuenta porciento de la intención del voto y un Balaguer decaido, pero en busca de mantener el 25 porciento que sabia tenia del electorado.
Ante esa realidad era poco el espacio que le quedaba al candidato del PLD.
Pero algo debemos tener claro los dominicanos, y es que el país perdió la oportuni-dad de tener un excelente Presidente cuyos resultados hubieran sido muy diferentes a la negra experiencia de HIpólito Mejia y sus adláteres.
Ahora todo indica que gentes con posibilidades presidenciales dentro del PLD, como son Francisco Javier Garcia, el propio Diandino Peña, y otros que se nos escpan a la mente, han de postergar sus aspiraciones para apoyar la candidatura del Presidente.
Y esto comienza a ponerse difícil en algunos estamentos del gobierno que han co-menzado una especie de guerrita contra Danilo y sus gentes, independientemente de que se dice, que el super-Secretario de Estado no hace tampoco mucho por sus gentes y no tiene ahora mismo como prioridad mantener ni sus amigos ni sus seguidores.
Quizás solamente sea un escarceo prematuro, pero si Danilo cuenta con el apoyo de Leonel en el próximo torneo electoral, y a Miguel Vargas Maldonado lo arropa el fu-nesto PPH, de seguro que seria el próximo Peledeísta en asumir la jefatura del estado.