SANTIAGO.- Luego de intensas jornadas de trabajo, acompañadas de las clemencias atmosféricas, esta ciudad ha recobrado completamente su normalidad, tras las intensas lluvias registradas el pasado jueves. Al cambio del clima también se le suma el trabajo hecho por brigadas de distintas instituciones estatales, que lograron retirar con prontitud los árboles y vallas derribadas por los fuertes vientos de esa tarde, así como el restablecimiento del sistema energético en varios sectores, debido al derribo de postes eléctricos.
Aunque el viernes y el sábado se produjeron precipitaciones acuíferas, estas no fueron lo suficientemente fuertes como para evitar que esta ciudad recobrara su forma de vida habitual.
Lugares como el hospital regional universitario José María Cabral y Báez, cuyo sótano resultó seriamente dañado por las aguas que se acumularon en su lateral, por la avenida 27 de Febrero, ya funcionan sin inconvenientes.
Medicamentos, alimentos, las plantas de emergencia y gran parte del sistema eléctrico de ese edificio resultaron afectadas por esa inclemencia de la naturaleza, que llegó a afectar áreas de su primera planta.
Todavía en la tarde del sábado se observaban afanosos empleados del Plan Social de la Presidencia, acompañados de brigadistas de la Defensa Civil, distribuyendo entre los damnificados las raciones alimenticias y demás ayudas destinadas por el gobierno.
Entre las zonas donde fueron distribuidas las ayudas del gobierno están los hoyos de Julia, Bartola, Puchula, las Mercedes, las Cayenas, los Santos, Los Cocos de Nibaje, El Fracatán y Gurabito. No obstante, decenas de familias denunciaron ayer que no habían recibido ayuda por parte del gobierno.
Francisco Arias, director regional del Centro de Operaciones de Emergencia (COE) informó que la gran mayoría de las familias afectadas por las crecidas de ríos, arroyos y cañadas, optaron en las horas recientes por regresar a sus hogares.
“Todo esto está ocurriendo, a pesar de que persiste el llamado de alerta para que, los residentes en esos lugares, los abandonen ante la posibilidad de que se produzcan aguaceros similares a los del jueves”, expresó.
HABLA JOSE ENRIQUE SUED
De su lado, el síndico José Enrique Sued resaltó el trabajo que, desde el momento que concluyeron los aguaceros del jueves, vienen realizando brigadas del Ayuntamiento, en el retiro de los obstáculos.
“Hemos mantenido a nuestras brigadas permanentemente en la calle y no descansaremos hasta ver limpia la ciudad por completo”, dijo Sued, en momentos en que realizaba labores de supervisión por distintos puntos de la ciudad entre el sábado y este domingo.
Manifestó que, desde el primer momento, impartió instrucciones al responsable del Departamento de Saneamiento Ambiental (Limpieza) Silvestre Aquino, para que los obreros municipales retiren los escombros arrojados a las vías públicas por este inesperado fenómeno atmosférico.
Desde que se registró el fenómeno, el Ayuntamiento ha estado presente ya que, tras su paso, brigadas de los bomberos salieron a la calle, por órdenes del sindico impartidas a través del coronel Alexis Moscat, para auxiliar a las personas afectadas.
Mientras que, al día siguiente, se conformaron brigadas especiales como forma de agilizar los trabajos de limpieza debido a que muchas calles y avenidas quedaron obstruidas por árboles que fueron derribados por las aguas y fuertes vientos.