WASHINGTON, 26 jun (IPS) – La producción de adormidera, principal insumo del opio, la heroína y la morfina, cayó el año pasado, en especial en el sudeste asiático, y la de cocaína se estancó, informó este lunes la Oficina contra la Droga y el Delito de la ONU (Unodc). En su Informe Mundial sobre las Drogas 2006, la agencia aplaudió los esfuerzos de Laos hacia la erradicación de los cultivos de adormidera, pero alertó que el consumo de cocaína en Europa occidental alcanzó en 2005 "niveles alarmantes".
En una sección especial de su estudio publicado en dos volúmenes, la Unodc sugiere que la droga ilícita más popular del mundo, el cannabis (marihuana), podría ser más peligrosa de lo que se creía anteriormente.
Los avances pueden revertirse fácilmente, en particular si los agricultores de las áreas de cultivo de adormidera o coca no reciben asistencia para el desarrollo, según el informe, que, de todos modos, tiene un tono optimista.
"El control de drogas funciona, y el problema mundial ha sido contenido", dijo el director ejecutivo de la Unodc, Antonio María Costa.
"Esto es cierto cuando analizamos el largo plazo o los últimos años", agregó. "La humanidad ingresó en el siglo XXI con menores niveles de cultivo de drogas y drogadicción que al siglo XX."
El funcionario consideró que "en los últimos años, los esfuerzos mundiales para reducir la amenaza de las drogas ilícitas detuvieron un aumento de un cuarto de siglo en el abuso de drogas que, de haber mantenido la sentencia, se habría convertido en una pandemia".
De todos modos, varios expertos cuestionaron algunas afirmaciones de Costa e incluso algunos hechos señalados en el informe, en particular la comparación de la producción y el consumo de drogas en la actualidad con el de hace un siglo, cuando se tomaron las primeras iniciativas mundiales al respecto.
La afirmación del jefe de la Unodc es "ridícula", sostuvo Ethan Nadelmann, director ejecutivo de la Alianza sobre Política de Drogas (DPA), organización con sede en Nueva York.
"Este informe constituye una evidencia que explica por qué tales evaluaciones deben ser realizadas por auditores externos e independientes más que por una institución altamente politizada como la Unodc", advirtió.
"El informe adolece la tensión entre los políticos de la Unodc, que quieren mantener un régimen estricto de controles, y expertos dispuestos a un debate abierto y honesto sobre la eficacia de los aspectos obsoletos del actual marco político", agregó Tom Blickman, del Programa Drogas y Democracia del Instituto Transnacional, con sede en Amsterdam.
Según Blickman, la Unodc "está sometida a la enorme presión de sus donantes estadounidenses".
El informe calcula el total de usuarios de drogas en el mundo en alrededor de 200 millones, o cinco por ciento de la población de entre 15 y 64 años. Según los autores, 162 millones consumen marihuana; 35 millones, estimulantes como las anfetaminas, incluido éxtasis; 16 millones, opiáceos, y 13 millones, cocaína.
El mayor avance de 2005 en la lucha contra las drogas fue la reducción de cinco por ciento en la producción de opio y 22 por ciento de del área cultivada con adormidera.
Gran parte de esa disminución se registró en el denominado Triángulo Dorado del sudeste asiático, donde la superficie cultivada total cayó de 160.000 hectáreas en 1998 a 34.600 en 2005.
En Birmania, que hasta hace pocos años era el principal productor de opio del mundo, se redujo a un cuarto el área cultivada respecto de 1998. En Laos, la reducción fue de 72 por ciento en apenas un año.
En Afganistán, país del que en 2005 surgió casi 90 por ciento del opio del mundo, la producción y la superficie cultivada cayó por primera vez desde la caída de Talibán a fines de 2001.
Pero los cultivos y la producción crecieron en lo que va de 2006, en particular en las provincias del sur.
La producción de opio también cayó en América en 2005, según el Informe. El gobierno de Colombia calculó que la superficie cultivada en ese país cayó 50 por ciento, y el de Estados Unidos consideró que en México se redujo 32 por ciento.
Los cultivos de coca y la producción de cocaína se mantuvieron estables el año pasado, de acuerdo con Unodc. La superficie cultivada con coca creció ocho por ciento en Colombia, donde se produce 54 por ciento del arbusto, mientras se registraron caídas en Bolivia y Perú.
Al mismo tiempo, se sextuplicaron las requisas en África occidental y central, que se ha convertido en un punto de paso cada vez más importante de cocaína hacia Europa, donde el consumo aumenta, con 3,5 millones de usuarios en total.
De todos modos, son menos que en América del Norte, donde los consumidores de cocaína se estiman en 6,5 millones, aunque en descenso.
Al mismo tiempo, se estabiliza el mercado de las anfetaminas, luego de su masivo aumento en los años 90. Y el uso de marihuana, que se produce en 176 países, aumenta en todos lados, aunque América del Norte es la región con más consumo en términos económicos.
El informe recomienda a los políticos que ha manifestado mayor tolerancia hacia la marihuana a "reconsiderar sus posiciones", dado que se han desarrollado variedades más potentes de la droga y que "recientes investigaciones indican que los riesgos de salud asociados con su consumo fueron subestimados en el pasado".
También se ha registrado un aumento en los "episodios agudos de salud" y en la demanda de rehabilitación por uso de cannabis, tanto en Estados Unidos como en Europa, según el estudio de la Unodc.
Nadelman, de DPA, calificó esos datos de "histéricos" y carentes de rigor científico. ( (FIN/2006)