WASHINGTON.-La mayoría de los votantes hispanos en Estados Unidos considera que la inmigración ilegal es un problema grave, pero no comparten la decisión del presidente George W. Bush de enviar militares a la frontera.
Sin embargo, esa mayoría desea que se dé a los indocumentados la oportunidad de obtener la residencia legal, según una encuesta difundida el lunes.
Un 54% contestó que esa oportunidad debería basarse en el cumplimiento de ciertos requisitos y la actualización por los interesados en sus pagos de impuestos, dijo Latino Policy Coalition (LPC o Coalición para la Política Latina), un grupo no partidista que difundió la encuesta en Sacramento, California.
Pero, la tendencia favorable es drásticamente menor en otras áreas de inmigración: Un 17% dijo que apoyaba un programa de trabajadores temporales, un 15% respaldó la amnistía directa y sólo un 6% apoyó las propuestas de declarar delincuentes a los indocumentados y enviarlos de regreso a su país.
Bush ha pedido un programa de trabajadores temporales, que ya ha sido incluido en un proyecto de ley aprobado por el Senado que también contiene provisiones sobre residencia y ciudadanía para los indocumentados. El proyecto, que no propone una amnistía directa, ha encontrado fuerte oposición en la Cámara de Representantes.
Siete de cada 10 votantes hispanos registrados ven la inmigración de indocumentados como un problema grave. La cifra es menor que una consulta similar realizada en abril, que arrojó que ocho de cada 10 votantes la consideraba de esa manera. Las manifestaciones callejeras realizadas a comienzos de mayo pueden haber tenido ese impacto, dijo la encuestadora Lake Research Partners.
Entre los votantes no inscritos, las preocupaciones también cayeron, pero la mayoría (68%) sigue considerándola como un grave problema contra el 81% de hace dos meses.
Lake Research Partners es un grupo de investigación allegado al Partido Demócrata y dijo que realizó la encuesta para LPC del 11 al 22 de junio, en 23 de los estados con la más alta concentración de hispanos. De los 1.100 consultados, 800 eran votantes inscritos demócratas o republicanos, y el resultado tiene un margen de error de +/-3.0 puntos porcentuales.
Preguntados si apoyaban el anuncio hecho en abril por Bush de enviar hasta 6.000 efectivos de la Guardia Nacional a la frontera con México, el 55% dijo que no estaba de acuerdo, pero un 34% que lo respaldaba.
"Lo que podemos estar presenciando con el tema de la inmigración es el inicio de un movimiento de derechos civiles entre los latinos", dijo Karthick Ramakrishnan, director del programa sobre políticas de inmigración, etnicidad y raza en la Universidad de California.
La encuesta fue realizada cinco meses antes de las elecciones legislativas de medio término en noviembre, en la cual una victoria demócrata de 15 asientos más le daría la mayoría en la Cámara de Representantes.
Jim González, presidente de LPC, dijo que hay un incremento en la inscripción de votantes y participación en los estados de California, Nuevo México, Colorado, Arizona y Nevada.
El voto hispano ha favorecido históricamente a candidatos demócratas, pero desde 1996 en que el 20% del voto hispano se fue para el Partido Republicano, la cifra llegó al 40% en 2004. Habrá elecciones presidenciales en 2008.