SANTO DOMINGO.-La esposa de Plutarco González Cedeño, Graciela Gómez. Será sometida este lunes a la Justicia por las hijas del finado artista Milton Peláez. El sometimiento lo harán los abogados Carlos Balcácer y Carlos Olivares, quienes anunciaron que depositarán la querella ante la Fiscalía del Distrito Nacional.
Graciela Gómez sería sometida por estafa, abuso de confianza y manejo fraudulento de los certificados financieros que tenía el humorista en el Banco del Progreso.
Este fin de semana la esposa del presunto homicida, Graciela Gómez, reconoció que su despido del banco donde trabajaba se debió a las violaciones a la política de la empresa en que incurrió “para complacer a sus clientes”.
Graciela Gómez, quien laboró por más de 12 años en el Banco del Progreso, admitió en una entrevista concedida a Noticias SIN, del canal 7, que cuando Peláez abría los certificados, lo hacía a nombre de su hija María Elvira Peláez, pero que cuando él necesitaba el dinero los endosaba él, según la versión de sus declaraciones publicadas por El Caribe.
“Eso es parte de mis violaciones a la política, pero son cosas que pasan en la relación gerente-cliente; mi falta a la política fue que autorizaba cheques en tránsito por encima de mi límite y permitía casos como los de Milton, que no era el único, y eso lo dice la auditoría”, dijo la esposa de Plutarco Ernesto González.
Explicó que el último certificado que Peláez canceló, su hija Maria Elvira tuvo que acudir al banco debido a que su oficina estaba siendo auditada y no se le permitía a Peláez firmar el certificado.
“Ella sabe que no estoy hablando mentira y puede decirlo porque ella sabía el manejo que había”, expresó Gómez. Rechazó especificar la cifra exacta de las inversiones de Peláez, pero aseguró que los certificados están en el Banco del Progreso.
Aseveró que la deuda de los 450 mil pesos fue una treta de Carlos Balcácer y que tuvo que desmentir cuando el caso llegó a la corte y aprovechó para pedirle al abogado que no involucre a su hijo Samuel Antonio, que nada tiene que ver con el hecho.
Aseguró que su familia ha mantenido un perfil bajo para no interferir en el dolor de la familia Peláez, cuya pena comparte.
“Tengo un doble dolor: por haber perdido a un buen amigo, y por mi esposo que está desmoralizado, involucrado en algo accidental; siento dolor por él y por toda su familia así como por la mía”, dijo entre lágrimas Gómez.
Reveló que han recibido llamadas “feas” y que su hijo Fernando ha recibido amenazas de muerte por correo electrónico.