MEXICO.-Aunque no lo quiera reconocer públicamente, lo que busca el candidato del PRD a la Presidencia de la República, Andrés Manuel López Obrador, es la anulación de los comicios del dos de julio que, de acuerdo con el cómputo distrital realizado por el IFE, le dieron el triunfo al panista Felipe Calderón Hinojosa.
La petición reiterada del recuento "voto por voto" es tan sólo un eslogan que López Obrador ha logrado posicionar en los medios, en forma similar a como lo hizo con el de "complot" que tanto éxito le dio cuando surgieron los videoescándalos.
En la "impugnación madre" que la coalición (PRD-PT-Convergencia) presentó el 10 de este mes en la Junta Distrital 15 y en las que fueron entregadas en cada uno de los 300 distritos, se le da poca importancia al recuento de los votos y en cambio se pone mucho énfasis en la petición expresa de que el TEPJF no declare válidas las elecciones.
Se ha hecho creer a los seguidores de López Obrador y a la ciudadanía en general que un recuento "voto por voto, casilla por casilla" de toda la elección, dará claridad sobre los resultados del dos de julio, pero la coalición ni siquiera hace expresamente esa petición. Sólo pide el recuento de las 50 mil casillas impugnadas.
En cambio, lo que sí exige claramente la coalición -y a lo que más espacio dedica en sus argumentaciones- es que no se declare válida la elección para presidente de la República.
La "impugnación madre" y las otras 299 "impugnaciones hijas" están llenas de alegatos genéricos como la supuesta falta de equidad, certeza e imparcialidad, para solicitar la invalidez de la elección, y tienen pocos argumentos específicos que pudieran sustentar, en su caso, la exigencia de la apertura de 50 mil casillas.
En el recurso presentado en la Junta Distrital 10 del DF, la coalición sostiene: "no es posible que la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación realice la declaración de validez de la elección de presidente de los Estados Unidos Mexicanos ni la declaratoria de presidente electo".
Y argumenta: "en los señalados comicios se violaron, de manera grave, los principios rectores del proceso electoral de certeza, legalidad, independencia, imparcialidad y objetividad, equidad y elecciones libres, auténticas y periódicas".
El escrito, que es prácticamente un machote de los que fueron presentados en los 300 distritos del país, sostiene: "en los comicios para elegir al titular del Poder Ejecutivo de la Unión fue violado el principio de elecciones libres, toda vez que por distintos medios se coaccionó la voluntad de los electores, principalmente por la vía de la campaña negra en medios masivos de comunicación".
Dice también: "no puede considerarse que la elección de presidente de los Estados Unidos Mexicanos en el proceso electoral 2005-2006 haya cumplido con los principios rectores del proceso electoral y con los principios de elecciones libres y auténticas".
En la impugnación, la Alianza que postuló a López Obrador pone énfasis en que con los mismos argumentos, el TEPJF declaró la nulidad abstracta de las elecciones de Tabasco en el año 2000 y sentó tesis de jurisprudencia.
En la parte que se refiere a las supuestas inconsistencias en casillas específicas, la coalición fue poco cuidadosa. Cuestiona los resultados de un número indeterminado de casillas que no existen o que tienen errores (posiblemente de "dedo") e inconsistencias en los datos, por lo que en el caso de éstas, el Tribunal ni siquiera entrará al fondo del asunto.
Por ejemplo, la coalición dice de la casilla 5085 contigua 2 de la delegación Miguel Hidalgo: "no coincide el número de boletas recibidas por el presidente de casilla, la cual fue de 404 con la suma de 293 boletas depositadas en la urna y las 141 boletas inutilizadas, la cual da una variante de más de 30". Esta casilla no existe.
Otra inexistente es la 4940 contigua 2, de la cual la coalición señala: "no coincide el número de boletas recibidas por el presidente de casilla, la cual fue de 405 con la suma de 309 boletas depositadas en la urna y las 175 boletas inutilizadas, lo que da una variante de más 11".
La lista de casillas inexistentes que fueron impugnadas es interminable. Otro ejemplo es la 2164, de la cual la coalición señala: "no coincide el número de boletas recibidas por el presidente de casilla, la cual fue de 455 con la suma de 314 boletas depositadas en la urna y las 167 boletas inutilizadas, lo que da una variante de más 24".
Además, hay un buen número de casillas que fueron impugnadas a pesar de que los datos asentados en las actas son totalmente coincidentes y están firmadas por los representantes de la coalición Por el Bien de Todos, y hay otras más que ya fueron abiertas durante los cómputos distritales.
No, definitivamente, el recuento "voto por voto" o la apertura de todos los paquetes, independientemente de su inviabilidad jurídica, no es la prioridad de López Obrador. El candidato perredista quiere una nueva elección. Por eso le dijo a Carmen Aristegui el 14 de este mes que aunque se contara "voto por voto", no reconocería el triunfo de Felipe Calderón.