Hoy se cumplen 3 años de la muerte de mi hijo Johan Enrique Pou Acta, un día como hoy 27 de julio del 2003 lo mato Domingo Antonio Jaime del Pozo, causante, culpable y condenado por la muerte de mi hijo.
Nadie sabe como han sido estos 3 años, nadie se lo imagina, solo las que pasamos por este dolor si lo sabemos.
Tres años llenos de dolor, angustia, desesperación, impotencia, llantos, gritos, lagrimas, la perdida de un hijo no tiene nombre solo se llama DOLOR EN EL ALMA E INEXPLICABLE.
Nunca he entendido porque ni como pasó esto, porque Domingo Antonio salio a las calles a una velocidad descomunal, cruzando una LUZ ROJA de un semáforo y mata a mi hijo, un joven de 20 años de edad lleno de vida y salud con un futuro por delante.
Que tristeza tan grande tengo en mi alma, peor, vivo en un país sordo, en un desierto de arena, donde nadie me oye (eso creo, eso pienso) quienes son nadie, La Autoridades de lugar que deben de buscar a este que esta Prófugo de la Justicia Dominicana desde el 18 de enero del 2006.
Enrique, mi prenda mas adorada, mi chichi querido, ¿Por qué? ¿Por qué? Porque te fuiste, nunca voy a entender en que se ha convertido mi vida, chichi esos cuatro (04) dias que estuviste en la clinica nunca respondiste, solo era una maquina que respiraba por ti, yo pensaba que esos tubos solo se veían en películas, pero era mi pesadilla, un mal sueño, vivo en la esperanza de que algún día te voy ver, de que ese día estaremos juntos por siempre y para siempre.
Chichi, mi niño querido, solo Dios sabe el vacío y la pena que esta tragedia ha traído a nuestras vidas, tu único hermano, Jonathan vive inundado en la pena, dolor y tristeza de saber que ya no estas a nuestro lado, pero sabemos que algún día estaremos los tres juntos para siempre.
Enriquito paz a tus restos hijo mío, Mami te quiere mas que ayer, mis ultimas palabras contigo 12 minutos antes de esta terrible tragedia “VEN DE UNA VEZ TE VOY A ESPERA, SI MAMI” nunca llegaste, nunca volviste, solo llego la mala noticia y de ahí para acá nuestras vidas cambiaron gracias a Domingo Antonio Jaime del Pozo.
Sandra Acta