La vida es como es. Supone una gran sabiduría e inteligencia saber llevarla y hacer que trabaje a nuestro favor. Es una pena que el ser humano que ha descubierto técnicas muy sofisticadas para casi todo, no haya podido inventar todavía una técnica que nos ayude a saber vivir bien, como millonarios… Los medios de comunicación social nos atosigan constantemente con hechos extraordinarios, por lo general negativos y escandalosos. Estos medios propagandísticos se encargan de recordarnos constantes necesidades para disfrutar plenamente de la vida. ¡Lo hacen muy bien!, nos hacen crearnos “necesidades innecesarias”, con lo que logran cada día más consumismo y guerra de apariencias que sólo nos llevan al hastío, a la angustia y al vacío.
La verdad es que el hombre no necesita grandes cosas. Lo normal en nuestra vida deben ser las cosas sencillas, que parecen pequeñas e insignificantes, pero que están ahí a nuestro lado y que suceden todos los días. Vivir como millonarios implica “ver lo que tenemos y valorarlo”. Con el pasar de los años nos damos cuenta tristemente de que como dice el dicho: “El más rico no es el que más tiene, sino el que menos necesita”.
A veces muy tarde nos percatamos de que a nadie se le prohibe contemplar un hermoso paisaje, que no cuesta nada acariciar el perrito que mueve su cola cuando llegamos a casa, que está al alcance de cualquiera beber un vaso de agua cristalina cuando estamos locos de sed, que a cualquiera nos puede sorprender en un momento inesperado un gesto cariñoso, unas palabras de aliento, un saludo sincero o un abrazo.
Lamentablemente las cosas cotidianas, las cosas sencillas y naturales que no cuestan nada, no tienen buena prensa; por el contrario sugieren aburrimiento, falta de vida y dejadez. La vida tranquila y sosegada de ciertos seres humanos con la capacidad de disfrutar lo que tienen y vivir felices, se mantienen en el anonimato, por lo que solamente vemos algunos hombres de negocios, empresarios, artistas y políticos dándonos la imagen de cómo viven los millonarios… y es lo de cada día, lo sencillo y lo que carece de relevancia, lo que muchas veces crea más felicidad y bienestar.
Vivir bien, como millonarios, es algo más que triunfar. Es sencillamente encontrar encanto y satisfacción en lo que solamente los ojos limpios pueden ver y está al alcance de todas las fortunas!
Solangge Burdiez