El precandidato presidencial del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC), Luís Toral, criticó que el Gobierno del presidente Leonel Fernández haya convocado un seminario para declararse incompetente ante el serio problema eléctrico que afecta a la economía dominicana.
Toral dijo, que si se observan críticamente lo que se ha anunciado como conclusiones de ese cónclave que concluyó el sábado, se puede deducir que no son recomendaciones reales las emanadas del mismo en Juan Dolio, sino una admisión de incompetencia de que no saben qué hacer con este grave problema.
Toral dijo que lo que está claro en esas conclusiones es que el Gobierno está evadiendo la responsabilidad de atacar de manera frontal la mafia eléctrica, “no la que como dice el presidente Leonel Fernández se la roba, sino la que se beneficia de los subsidios, de los apagones y de la elevada tarifa que le aplican a la población.
Y agregó que por eso, en vez de plantearse en el seminario hacer cumplir seriamente la Ley de Electricidad, “que es lo correcto de parte de un Gobierno, lo que deciden es anunciar que la van a revisar, de modo que mientras hacen eso, ese sector permanecerá como chivo sin ley”.
“Un gobierno serio y responsable lo primero que se plantea es hacer que se cumpla la ley, y luego, si en el curso de su ejecución hay aspectos que deben ser revisados, que se revisen”, explicó Toral en declaraciones servidas a través de su Oficina de Comunicación.
Toral dijo que no era necesario trasladarse a Juan Dolio a discutir un asunto del que surgieron las mismas conclusiones de otros cónclaves organizados por el Gobierno y el sector privado.
El dirigente del PRSC dijo que ya se conocían esas recomendaciones en el sentido de que era necesario tomar medidas para castigar el robo de electricidad, mejorar la generación, renegociar los contratos de Madrid y revisar el marco legal.
“Ellos, incluyendo el presidente Leonel Fernández, ya habían planteado eso y ahora se gastan un dineral en un seminario para decirle al país que el asunto eléctrico no será resuelto en este Gobierno, sino en el 2012”, expresó Toral.
“Por qué no surgió de ese seminario la decisión de revisar los costos de generación y distribución, por qué no decidieron ellos en su reunión revisar los exorbitantes sueldos que se pagan y pagan a técnicos, muchos superiores al sueldo del presidente de la República, por qué no tomaron la decisión de acabar con el derroche que hay en ese sector”, se preguntó Toral.
“Este Gobierno, en el 1996 dijo que en tres meses solucionaba el asunto eléctrico, llegaron al poder y entregaron el plantel eléctrico a sectores privados, con el alegato de que no había que pagar subsidio y ocurrió todo lo contrario, luego llagan al poder en el 2004 prometiendo que acabarían con los apagones y ahora dicen que es el 2012 que lo harán”, comentó Toral.
“Este Gobierno no puede enfrentar el problema eléctrico, porque los que metieron al país en el atolladero que está son los mismos que están dirigiendo ese sector, incluyendo el presidente Fernández, el Gobierno es parte del problema y por lo tanto está inhabilitado para solucionarlo”, dijo.
Toral comentó que como es posible que gente que se ve a diario en Palacio Nacional, donde se ven la cara sin saber que hacer con el asunto eléctrico, tengan que ir a un hotel a repetirse ellos mismos sus argumentaciones para parir lo mismo que le han dicho a la población.
Recordó que el presidente de la República juró el 16 de agosto cumplir la Constitución y las Leyes y hace todo lo contrario, cuando no aplica leyes como la de Electricidad, de Seguridad Social, del Derecho al Consumidor y otras.
Toral dijo que el Gobierno tampoco sabe qué hacer con el dengue, admitido por el secretario de Salud Pública, ni saben que hacer con el déficit cuasi fiscal del Banco Central.
“Este Gobierno tampoco sabe qué hacer con la Educación; ya lo han dicho prestigiosas universidades, es de las peores de América Latina, con la más baja inversión”, dijo Toral.
Y agrega que así como pretende posponer el problema eléctrico para el 2012, quiere emitir unos bonos para cubrir el déficit del Banco Central para posponer esa deuda para dentro de diez años.