El licenciado Roberto Reyna anunció que dos mil voluntarios de la Universidad Autónoma de Santo Domingo participaran en el programa de alfabetizaciòn que ejecutará la academia en los próximos días.
La información la ofreció el rector de esa institución durante su discurso pronunciado en el acto de la trigésima tercera investidura ordinaria en la que se graduaron 614 nuevos profesionales de diferentes áreas el conocimiento, en el Centro Universitario Regional del Nordeste, CURNE-UASD, en San Francisco de Macorís.
Reveló que el programa cuenta con el respaldo del Gobierno Central, con la participación de la Secretaria de Estado de Educación, el Despacho de la Primera Dama, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la sociedad política del país y el empresariado.
Reyna indicó que los voluntarios “saldrán casa por casa para entregar una hoja que deberá ser llenada por los dominicanos y dominicanas y en caso de que la misma no pueda ser completada, la persona será alfabetizada”.
El rector destacó que el país cuenta con más de un millón de analfabeto, tras agregar que desde el inicio de la gestión que encabeza, la universidad ha expresado su compromiso de ser parte del espíritu que libere a esos dominicanos de la ignorancia.
En torno al dengue, el rector de la UASD informó que la brigada del voluntariado contra el Dengue ya está trabajando bajo la dirección de la Escuela de Salud Pública y de los Institutos de Microbiología y Parasicología de las facultades de Ciencias de la Salud y de Ciencias, respectivamente.
Reyna señaló que los participantes están identificados con un carné que dice “Soy de la UASD déjame entrar a tu casa para ver si hay peligro de Dengue”.
Al valorar los trabajos de modernización que se lleva a cabo en la Primada de América, el funcionario universitario indicó que no es posible que se siga desprestigiando a la academia por algunos malos universitarios que prefieren ir a las calles hablar mal de sus familias en vez de dirimir sus diferencias en las instancias de la misma.
En otro orden, el rector Roberto Reyna anunció que la UASD fue escogida para desarrollar el Voluntariado Estudiantil Universitario de las Naciones Unidas en América Latina, no obstante la ausencia de la universidad en esa reunión que se realizó en Argentina,
“De esa UASD es que hay que estar hablando y sentirse orgullosa de ella”, sentenció el rector al momento de recibir un fuerte aplauso por los graduandos y sus familiares, quienes se pusieron de pies, dándole con ello un apoyo al proceso de modernización que lleva a cabo la gestión que encabeza Reyna en esa alta casa de estudios.
Señaló que seguirá trabajado en mejorar las condiciones de vida de los universitarios, al destacar los esfuerzos que se están haciendo en la dirección de la contratación de un nuevo seguro médico, de vida y servicios funerarios y el financiamiento para la construcción de trescientas viviendas.
Asimismo, los llamados a los concursos de licitación para los equipos y alimentos del Comedor Universitario, el cargo de Contralor, la colocación en Internet de la nómina de profesores y empleados y el avances de la construcción de la estancia infantil que se ejecuta en el campus.
“No hay una sola razón, y lo digo en voz alta al país para no sentirse orgulloso de ser parte de la UASD de una institución en que cada día se levanta con el trabajo, donde se puede equivocar con una decisión, pero donde cada día se construye la luz, donde crece el país y se construye el conocimiento”, sentenció.
Reyna llamó acabar con el chisme y el rumor en la academia y al que quiera acusar a alguien que lo haga responsablemente apoderando de un expediente a un organismo.
El rector de la UASD exhortó a la familia universitaria a darle de lado a lo que el funcionario calificó de irrespeto y de desconsideración de un segmento pequeño que se mueve en la academia motivado por el odio y el desamor.
El discurso de apertura estuvo a cargo de Ana Rita Guzmán, directora del Centro Universitario Regional del Nordeste (Curne), y las palabras de agradecimientos en nombre de sus compañeros la pronunció Sobeyda Antonio, quien obtuvo los máximos honores