NAVARRETE.- Centenares de personas asistieron este martes en la tarde al acto de enterramiento del dirigente izquierdista Elvin Amable Rodríguez, asesinado por una patrulla policial el lunes en la noche y que, de acuerdo a esa institución, murió en un intercambio de disparos. Previo a ser llevados al cementerio de este municipio, los restos de Onny Rodríguez fueron llevados por la muchedumbre por diferentes calles del pueblo incluyendo por el frente del destacamento de la Policía, que estaba celosamente vigilado por miembros de esa institución, provistos de armas cortas y largas.
Minutos de tensión se vivieron mientras el cuerpo de Onny Rodríguez era pasado frente al recinto policial y la incertidumbre se tornó más patética, cuando los que llevaban en hombros la caja, decidieron levantarla en ese lugar y permanecer por casi un minuto parados allí.
El ataúd conteniendo el cadáver del vocero del Frente Amplio de Lucha Popular en esta localidad fue depositado en la bóveda casi a las seis de la tarde. Previamente hablaron Higinio Báez, del Movimiento Popular Dominicano; Juan Carlos Francisco y Fidel Santana, de la agrupación de la que era dirigente el joven asesinado, así como Wilson Gómez, compañero de estudio del fenecido, en el ámbito universitario.
Mientras se producía la ceremonia de enterramiento, por los alrededores del campo santo se produjo el encendido de neumáticos y la obstrucción del tránsito por la carretera que conduce hasta la Línea Noroeste. Luego, el bloqueo de las vías públicas se extendió por todo el municipio y, en horas de la noche, se escucharon detonaciones de bombas caseras y disparos.
Una apreciable cantidad de los jóvenes que tributaron el último adiós a Onny Rodríguez estaba armada incluso con fusiles. Originalmente agentes policiales se apostaron en las cercanías del cementerio mientras se producía el sepelio pero, cuando la multitud abandonó el lugar, ya no estaban.
Con la muerte de este joven de 22 años, suman seis los dirigentes del FALPO que mueren en las mismas circunstancias, en los últimos seis años, Los demás son Osvaldo Torres (Fury), Junior Rafael Espinal, Sócrates García Padilla, José Alfredo Mendoza y Gabriel Luciano Guzmán.
Los dirigentes del FALPO y el MPD que hicieron uso de la palabra en el entierro, acusaron al gobierno de la muerte y prometieron que no se dejarán asesinar en las casas, sino que saldrán a redoblar sus reclamos “y si quieren que corramos la misma suerte que Onny, entonces a la policía que se prepare para exterminarnos”.
A media mañana de ayer, la Dirección Cibao Central de la Policía Nacional, aseguró que Rodríguez fue asesinado cuando la patrulla de esa institución repelió una agresión a tiros de Rodríguez, quien alegadamente estaba acompañado de otro joven, que escapó.
El parte policial establece que la patrulla policial estaba integrada por el sargento Aldo Rafael Fernández Fernández, quien supuestamente sufrió heridas de perdigones en el pómulo izquierdo y el cabo Antonio de Jesús Espinal Mesón
“Los agentes policiales se presentaron al sector Barrio Nuevo Pontoncito, de Navarrete, atendiendo a una llamada de moradores de que en el lugar había dos atracadores encapuchados, siendo atacados a tiros por los individuos, repeliendo la acción de inmediato”, asegura la versión policial.
Dio seguridades que Rodríguez estaba encapuchado, y a quien se le ocupó la pistola marca Smith And Wesson, calibre. Nueve milímetros, modelo TDS9663.
Sin embargo, testigos de los hechos alegaron todo lo contrario, acusando a la patrulla policial de haber ejecutado a Onny Rodríguez. Relataron que el joven se encontraba en un colmado del barrio y allí fue hecho preso por la patrulla, la que procedió a colocarle una capucha, lo condujeron como a 20 metros más adelante y allí le hicieron varios disparos, uno de los cuales le hizo brotar la masa encefálica.
Horas antes de su asesinato, Onny Rodríguez había participado en una reunión, en la comunidad La Lomota, de este municipio, donde se afinaron detalles para una protesta pública, en reclamo de la construcción de la carretera que una ambas localidades.
Su muerte deja viuda a Ivelisse Mena, con un embarazo de seis meses. Precisamente el joven se dirigía a buscarla al trabajo que ella tiene en una banca de apuestas, cuando fue apresado por la patrulla policial que luego le dio muerte.